Román se reúne con los vecinos del edificio desalojado en Guadalajara y envía a la Junta las peticiones de los afectados

07/02/2018 - 16:44 EP

El alcalde ha comentado que la responsabilidad de lo ocurrido recae en la Empresa Pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (Gicaman).

El alcalde de Guadalajara, Antonio Román, ha mantenido un encuentro con los vecinos que recientemente han tenido que ser desalojados de las viviendas sociales que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene en la calle Laguna La Colmada, en el que ha explicado a estas personas las actuaciones emprendidas por el Ayuntamiento desde que se decretó la orden inicial de desalojo y, además, ha remitido una carta a la consejera de Fomento, Agustina García Élez, en la que traslada las peticiones que le han hecho estos vecinos.

El alcalde ha comentado que la responsabilidad de lo ocurrido recae en la Empresa Pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (Gicaman), encargada de ejecutar los edificios. Según ha informado el Consistorio guadalajareño en nota de prensa, Román ha señalado que lo prioritario para el Ayuntamiento de Guadalajara es que los vecinos puedan regresar "con todas las garantías de seguridad" a sus viviendas, una vez se subsanen todas las deficiencias detectadas en el inmueble.

Por otra parte, en la misiva enviada a García Élez se recogen reclamaciones de los afectados tales como que las familias que se encuentran en hoteles sean realojadas en viviendas "a la mayor brevedad posible". Los afectados también han reclamado la necesidad de una mayor transparencia en la información por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha en relación a la oferta de posibles viviendas y también sobre la situación estructural de sus viviendas y previsiones futuras.

En el encuentro, los afectados también han mostrado su disconformidad por el hecho de que en algún caso se había girado el cobro del alquiler de su vivienda, que no pueden ocupar, al tiempo que tienen que sufragar el alquiler de la nueva vivienda. Esto entraña "un importante perjuicio" ya que muchos vecinos están pagando el recibo de su antigua vivienda y, además, el de la vivienda en la que se encuentran alojados".