Sabrido aboga por alcanzar un pacto en financiación sanitaria
01/10/2010 - 09:45
Alcanzar un pacto global en materia de financiación sanitaria, siempre que se preserve el principio de que ante la misma necesidad en el ámbito salud se tenga el mismo acceso a los servicios y prestaciones del Sistema Nacional de Salud, debe ser uno de los principales objetivos de la legislatura, adelantó ayer en Toledo el consejero de Sanidad, Roberto Sabrido.
Estamos en un momento político muy importante y sería bueno que entre todos podamos alcanzar un gran pacto sobre financiación sanitaria.
Solo con un pacto podremos hacer frente a las nuevas necesidades que se están generando en el campo asistencial, como es el envejecimiento de la población, y preservar el principio de que ante la misma necesidad, igualdad de acceso para los ciudadanos, además de hacer un esfuerzo adicional por parte de los gestores sanitarios para hacer más eficiente el presupuesto que tenemos, aseguró Sabrido poco antes de asistir a las jornadas organizadas por el Consejo Económico y Social para presentar oficialmente su estudio sobre la incidencia del gasto sanitario público en la economía y en la sociedad de Castilla-La Mancha tras las transferencias.
Respecto a este estudio, el consejero indicó que las transferencias sanitarias a la región en enero de 2002 han dinamizado la economía regional, con una especial incidencia en el crecimiento del Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma y con una inversión sanitaria por habitante en Castilla-La Mancha superior a la media nacional y a otras comunidades como Cataluña, Comunidad Valenciana o Madrid.
Por su parte, el presidente del CES de Castilla-La Mancha, Juan Antonio Mata, destacó que el estudio, que comprende los años 2002-2004 -los primeros tres años transferenciales- refleja el importante esfuerzo inversor del Gobierno de Castilla-La Mancha en materia sanitaria por encima del que llevó a cabo el ya desaparecido Insalud durante los últimos de su gestión de la asistencia sanitaria en la región.
El esfuerzo adicional por parte del Gobierno regional en este periodo de 2002 a 2004 se cifra en 236 millones de euros y ha permitido crear 5.200 empleos netos en la sanidad, tanto específicos como inducidos en otros sectores como la construcción, por ejemplo, afirmó Mata.
Así, según el estudio, los efectos totales sobre el empleo de la inversión sanitaria pública en Castilla-La Mancha entre 2002 y 2004 ha supuesto la creación de 5.191 puestos de trabajo, de los cuales 791 son indirectos, siendo los sectores más beneficiados la sanidad de mercado, la construcción y el comercio, tanto al por mayor como al por menor.
También, en materia económica, la inversión sanitaria ha tenido efectos multiplicadores positivos en un conjunto de sectores que van desde las actividades inmobiliarias y servicios empresariales, hasta la sanidad de no mercado, la energía eléctrica, gas y agua, la industria química, el comercio al por mayor y al por menor, transportes, hostelería o metalurgia.
Renta familiar
Además, la financiación pública de la sanidad ha supuesto que las familias de la región dejen de gastar de su propia renta 2.300 euros en 2002 y 2.004 euros en 2003 en ese apartado y que el PIB regional en actividades sanitarias, veterinarias y servicios sociales haya crecido en 2004 ocho puntos por encima de lo que subió en 2000.
Solo con un pacto podremos hacer frente a las nuevas necesidades que se están generando en el campo asistencial, como es el envejecimiento de la población, y preservar el principio de que ante la misma necesidad, igualdad de acceso para los ciudadanos, además de hacer un esfuerzo adicional por parte de los gestores sanitarios para hacer más eficiente el presupuesto que tenemos, aseguró Sabrido poco antes de asistir a las jornadas organizadas por el Consejo Económico y Social para presentar oficialmente su estudio sobre la incidencia del gasto sanitario público en la economía y en la sociedad de Castilla-La Mancha tras las transferencias.
Respecto a este estudio, el consejero indicó que las transferencias sanitarias a la región en enero de 2002 han dinamizado la economía regional, con una especial incidencia en el crecimiento del Producto Interior Bruto de la Comunidad Autónoma y con una inversión sanitaria por habitante en Castilla-La Mancha superior a la media nacional y a otras comunidades como Cataluña, Comunidad Valenciana o Madrid.
Por su parte, el presidente del CES de Castilla-La Mancha, Juan Antonio Mata, destacó que el estudio, que comprende los años 2002-2004 -los primeros tres años transferenciales- refleja el importante esfuerzo inversor del Gobierno de Castilla-La Mancha en materia sanitaria por encima del que llevó a cabo el ya desaparecido Insalud durante los últimos de su gestión de la asistencia sanitaria en la región.
El esfuerzo adicional por parte del Gobierno regional en este periodo de 2002 a 2004 se cifra en 236 millones de euros y ha permitido crear 5.200 empleos netos en la sanidad, tanto específicos como inducidos en otros sectores como la construcción, por ejemplo, afirmó Mata.
Así, según el estudio, los efectos totales sobre el empleo de la inversión sanitaria pública en Castilla-La Mancha entre 2002 y 2004 ha supuesto la creación de 5.191 puestos de trabajo, de los cuales 791 son indirectos, siendo los sectores más beneficiados la sanidad de mercado, la construcción y el comercio, tanto al por mayor como al por menor.
También, en materia económica, la inversión sanitaria ha tenido efectos multiplicadores positivos en un conjunto de sectores que van desde las actividades inmobiliarias y servicios empresariales, hasta la sanidad de no mercado, la energía eléctrica, gas y agua, la industria química, el comercio al por mayor y al por menor, transportes, hostelería o metalurgia.
Renta familiar
Además, la financiación pública de la sanidad ha supuesto que las familias de la región dejen de gastar de su propia renta 2.300 euros en 2002 y 2.004 euros en 2003 en ese apartado y que el PIB regional en actividades sanitarias, veterinarias y servicios sociales haya crecido en 2004 ocho puntos por encima de lo que subió en 2000.