San Blas vence a la pandemia y recorre resplandeciente las calles de Valdenoches

04/02/2023 - 18:15 Redacción

Durante este fin de semana se celebra en la pedanía guadalajareña de Valdenoches la Fiesta de San Blas, una tradicional celebración que se recupera tras la pandemia con gran acogida entre los vecinos, tanto los que viven en la localidad, como los hijos del pueblo que han venido desde Madrid y otras localidades de la provincia y la capital.

El alcalde de la localidad, Fernando Arroyo, ha destacado la gran afluencia a los actos y el buen tiempo, a la vez que se ha mostrado satisfecho por el uso que se está dando al Centro Social, “que ha servido como punto de reencuentro del pueblo; no ha faltado prácticamente nadie, aunque hemos echado de menos a todas aquellas personas que, por su edad, no han podido acudir, de la misma forma que los que han tenido que cumplir con sus obligaciones laborales o los que, por razones de residencia –hay algunos que viven de Barcelona-, no han logrado asistir”.

Junto al alcalde, tomaron parte en los actos los tenientes de Alcalde de Guadalajara, Rafael Pérez Borda y Sara Simón, la concejala de Barrios Anexionados, Pilar Sánchez, así como la de Cultura, Riansares Serrano.

Esta mañana se ha celebrado la misa en Honor al Santo, a cargo del párroco, Luis Herranz -amenizada por el coro de la parroquia de San Pedro Apóstol de Guadalajara- así como la procesión de la imagen, acompañada por los acordes de los Gaiteros de Mirasierra.

Al final del desfile procesional se ha llevado a cabo la subasta de los brazos del anda del Santo, recuperándose uno de los actos más tradicionales, junto a la degustación posterior de las rosquillas del santo, siempre caseras y fritas, con vino y refrescos, ya en el Centro Cultural. A la posterior comida han acudido en torno a 160 personas que han saboreado unas sabrosas carrilleras guisadas.

Un espectáculo de magia para niños y adultos, a cargo del Mago Ráferty, de Guadalajara, y la actuación del también guadalajareño cuarteto Tierra, ponen el broche al día grande.

La celebración concluirá mañana con un aperitivo y despedida con un pequeño baile después de comer.

Las fiestas de San Blas se celebran desde tiempos inmemoriales el fin de semana más cercano al 3 de febrero. Este año –asegura Arroyo- la Comisión de Festejos consideró oportuno que comenzaran el propio día del Santo, ya que, al caer en viernes, coincidía con la llegada de los vecinos para pasar el fin de semana. Es por ello que, ya por la tarde, se desarrolló una merienda y una discomóvil a la que acudió numerosa gente venida de fuera cuya participación contribuyó a que el ambiente fuera “excelente”.

Ahora todo el pueblo tiene las miras puestas en las fiestas mayores, en honor a San Antonio de Padua (13 de junio). Como todos los años, la Comisión de Festejos se pondrá manos a la obra para materializar sus deseos con vistas a la diversión y el hermanamiento de los vecinos y todo aquel que quiera acercarse.