Servicios Truferos Aparicio patenta la realización automática de nidos truferos por localización GPS

23/03/2022 - 08:35 Sara Vera Juárez

La humedad constante en estos pozos aumenta las probabilidades de obtener trufa

Es bien sabido en el sector de la truficultura que los nidos contribuyen con la producción de esta materia prima. Estas excavaciones en la tierra y alrededor del árbol se siguen realizando con técnicas arcaicas. Por ello, Servicios Truferos Aparicio (PADIDÚ) ha desarrollado un método totalmente automático para la elaboración de estos nidos. 

Un robot polivalente
Este robot es el mismo que se utiliza para la plantación de árboles por geolocalización y para la extracción de trufas. La única variación que presenta es su brazo, pues éste será diferente según la tarea que se le designe. Además, llevará integrados palpadores de Renishaw, diseñados para obtener la máxima precisión de medición y detectar cualquier obstáculo en el camino que pueda provocar cualquier choque o colisión.
La actividad de este vehículo autónomo no entrará en funcionamiento hasta que no se haya digitalizado el terreno y plantado los árboles por localización GPS, ya que el robot se guía en función de las coordenadas que, previamente, se han almacenado del campo de cultivo. De esta forma, el agricultor podrá programar la realización automática de nidos a los árboles que él desee. 
“La misión de este robot es acercarse al árbol y excavar alrededor del mismo pequeños hoyos en la tierra, pues consta de una estrategia de perforación previamente programada. Las dimensiones más adecuadas oscilarían entre los 20 y 25 centímetros de profundidad y los 30 centímetros de diámetro”, señala Juan Carlos García Aparicio, CEO de la compañía.  “Lo ideal es que estos agujeros se sitúen cerca de la superficie porque cuanta más profundidad más pequeña será la trufa a causa de la presión ejercida por la tierra”, añade. 
A la hora de instalar estos pozos se tendrán en cuenta las terminaciones de las ramas de los árboles, pues es debajo de éstas donde se encuentra el punto en el que más agua de lluvia se deposita. Es, por lo tanto, una localización idónea para la cría de trufas, ya que precisan de bastante humedad. El número de nidos los determina el agricultor. Sin embargo, la cantidad que normalmente se establece es de seis u ocho. 
La producción de trufa tendrá lugar cada dos años. Si el cultivador quiere recolectar trufa todos los años, deberá llevar a cabo este procedimiento anulamente, creando nuevos nidos en localizaciones distintas.

Turba enriquecida de nutrientes
Tras la excavación de los nidos, el robot rellenará automáticamente estas cavidades a base de sustratos naturales entremezclados con esporas. Además, se introducirán bolsas humidificadoras AA68.5, unos bioestimulantes capaces de retener humedad hasta dos meses y liberarla en el tiempo. Estos sacos contienen raíces hidropónicas con poder de citoquinas, las cuales permiten que la planta aumente su calibre y el número de frutos; y con poder de auxinas, que favorecen el crecimiento del tejido trabecular de las raíces y absorben grandes cantidades de agua a fin de que se mantenga humedad constante en la explotación. Todos ellos conformarían la receta perfecta para el desarrollo y proliferación de este diamante negro, multiplicando por tres el número de raíces y en ningún caso provocarían el envejecimiento del árbol.
“Las trufas tienen todos los condicionantes para originarse dentro del nido porque es donde más humedad se halla”, asevera García Aparicio. No obstante, existen trufas que emanan fuera de éstos, denominadas trufas de tronco o de camino, que son producidas por los propios árboles. Los objetivos de esta fase del proyecto son: abaratar costes, ahorrar tiempo, consumir menos agua y evitar esfuerzos físicos. 
En la edición del próximo viernes, 1 de marzo, podrás descubrir detalles sobre la configuración y el funcionamiento del riego por flotadores en el cultivo de trufa.