Sigüenza no recibe residuos industriales peligrosos de Navarra
La Junta recuerda que se hacen controles periódicos y desde Ecologistas pide controles más exhaustivos
Una denuncia de Ecologistas en Acción ha hecho saltar las alarmas entre varios vecinos de la provincia, sobre todo de Sigüenza. Según explica el portavoz de Ecologistas en Acción Cuenca, Carlos Villeta, se está produciendo un traslado masivo de residuos desde las comunidades que tienen tasa de recepción de residuos a otras que no cuentan con él, entre las que se encuentra Castilla-La Mancha, que estaría recibiendo residuos industriales de Cataluña, Levante, Madrid y Navarra.
En el caso de la región, uno de los casos más llamativos sería el de Sigüenza, a la que Villeta asegura que estarían llegando el 100 por cien de los residuos industriales no peligrosos con los que trabaja la empresa Gestión Ambiental de Navarra. Y precisamente eso es lo que destaca también el viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Marchán. “No están viniendo residuos peligrosos a Sigüenza. Solo vienen códigos de no peligrosos”, confirma antes de apuntar que, además, en ningún caso se superan las 4.000 toneladas al año.
Aunque Ecologistas lleva tiempo investigando este traslado de residuos, el tema ha cobrado más visibilidad a raíz de lo ocurrido en el vertedero de Zaldivar, en el País Vasco, otra de las comunidades que no tienen tasa de vertidos, por lo que recibía residuos de otras regiones del país. Además, Villeta advierte que “en Zaldivar tampoco deberían haber tenido residuos peligrosos que finalmente sí han aparecido, como el amianto”, algo que teme que también se esté produciendo en Sigüenza. “Hay comunidades en los que las inspecciones son más laxas y las empresas no siempre cumplen como deberían”, lamenta. De hecho, desde Ecologistas en Acción Guadalajara, Alberto Mayor también apunta que llevan dos años pidiendo que se realicen inspecciones más exhaustivas en este vertedor para confirmar que no se están transportando residuos peligrosos mezclados con los no peligros.
Sin embargo, Marchán asegura que las instalaciones seguntinas “están sujeta a unas inspecciones periódicas presenciales y documentales” que no han arrojado dudas sobre la gestión que se hace en la planta. Además, espera que en futuro se reduzca este tránsito de residuos, ya que el Gobierno regional está trabajando en una Ley de Economía Circular que contempla la entrada en vigor de una tasa de residuos.