Un músico que Guadalajara nunca olvidará:Pedro Antonio Díaz ‘El Pelirrojo’
En nuestra querida Guadalajara, los amantes del mundo de la música nunca olvidarán a un compositor y músico del instrumento de la batería de varios grupos: Pedro Antonio Díaz. Pedro Díaz nació el 16 de febrero del año 1956 en una vivienda de la calle Marqués de Santillana. Son muchos los que añoran una placa en su fachada que recuerde al inolvidable compositor arriacense.
Desde muy joven y cuando estudiaba en el colegio de Salesianos de nuestra ciudad comenzó a disfrutar de la música junto a varios de sus compañeros de colegio. Adquirió su primer instrumento musical, en concreto una batería, con los primeros ahorrillos que se ganaba como pintor y empapelador, cuando aprovechaba las vacaciones estivales y no tenía colegio.
Su primer grupo musical en el que pudo disfrutar de su inseparable batería fue el conjunto local Escarcha. Era un quinteto que estaba formado por Luis Alberto Jodra, Fernando Burgos, Raúl Herranz, José Luis Ambite y el propio Pedro Díaz. Fueron míticos sus conciertos veraniegos en la Piscina Municipal, locales musicales de la ciudad e igualmente en numerosas verbenas populares de algunos barrios de Guadalajara.
Cuando Pedro Díaz terminó sus estudios de Bachillerato en la ciudad se trasladó a Madrid para comenzar su carrera de ingeniero de Telecomunicaciones. Una tarde escuchó a través de las ondas radiofónicas, en concreto, la cadena Onda 2, que los hermanos Urquijo buscaban un músico que tocase la batería, ya que el integrante Canito, había fallecido de manera repentina. Tras una prueba de sonido en un estudio musical de la capital de España, el bueno de Pedro era contratado y pasaba a formar parte del grupo de la movida madrileña: Los Secretos.
Su primer lanzamiento musical sale al mercado en marzo del año 1980, con temas tan conocidos como: Déjame, A tu lado, Quiero beber hasta perder el control y otros muchos. La primera aparición del grupo Los Secretos, en nuestra ciudad, es en la fiesta del mes de junio, en el colegio de Los Maristas, con motivo de la festividad de su patrón, Marcelino Champagnat. Un concierto que supuso un auténtico exitazo y que a la postre fue inolvidable. Posteriormente volverían a actuar en salas como Zoyka- 2 y el mítico Pub El Puerto.
La triunfal carrera musical de Pedro Díaz se truncó de manera definitiva en la mañana del 12 de mayo del año 1984. Un brutal accidente de circulación a la salida de Guadalajara hacia Madrid, en concreto, en la conocida bajada del toro, acababa con la vida de Pedrito y su acompañante. Como muy bien dice la canción que él compuso: Sobre un vídrio mojado, esa mañana en Guadalajara las rosas no eran flores, no había pájaros en la mañana y ya nada fue igual, nadaaaa...
El Ayuntamiento de Guadalajara siempre tuvo a Pedro Antonio Díaz en el recuerdo. De esa manera, el auditorio musical de Aguas Vivas, que por cierto se encuentra totalmente abandonado y lleno de vegetación salvaje y pintadas, lleva su nombre. Igualmente, desde el año 2014, una de las salas de conciertos del Espacio Tyce, lleva el nombre del que fue uno de los grandes compositores de Guadalajara: Pedro Antonio Díaz... El Pelirrojo.
Fotografía: Alfonso Romo