Un total de 34 saharauis disfrutan ya de sus vacaciones en paz

20/07/2016 - 10:28 M. T. A.

La asociación quiere poner en marcha el Programa Madrasa, para que los niños puedan quedarse en España para estudiar y volver al Sahara en verano.

Los niños saharauis ya están en España disfrutando de sus vacaciones en paz. En esta ocasión han llegado a la provincia un total de 34 menores, dos menos de los previstos inicialmente. Uno de ellos no ha podido viajar porque tenía una tía enferma, y del otro se desconocen los motivos. La previsión de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui era que viniesen 36 y consiguieron tener familias de acogida para todos, e incluso siete quedaron en lista de espera, por lo que cumplieron su objetivo.
    Los niños llegaron a Guadalajara el 26 de junio, unos días después de lo previsto debido a problemas de coordinación entre la Delegación Saharaui y la Española. Estos vinieron con los niños que están disfrutando del programa Vacaciones en Paz en Madrid, ya que los de Castilla-La Mancha vinieron a principios de julio, y se marcharán el 22 de agosto.
    Estos 34 niños tienen edades comprendidas entre los 10 y los 13 años, ya que se ha incrementado la edad, pues antes permitían venir a niños más pequeños, y de ellos, nueve son nuevos, han venido por primera vez, y del total de familias de acogida, 16 son también nuevas. Los pequeños disfrutarán del verano en diferentes localidades de la provincia, entre ellas, Villanueva de la Torre, El Casar, Marchamalo e Iriépal, además de Guadalajara capital.
    Durante estos casi dos meses que están en la provincia, los pequeños se someterán a exámenes médicos y disfrutarán de la vida fuera de los campamentos de refugiados del Sáhara con sus familias de acogida. Durante este periodo, además, compartirán actividades organizadas por la asociación, como el encuentro de bienvenida. También está previsto que se reúnan en la recepción del Ayuntamiento y la fiesta de despedida, el próximo 17 de agosto, en la finca que Diputación tiene en Alovera. A lo largo de estos meses, la asociación realiza también un seguimiento, sobre todo en el caso de los niños que han venido por primera vez, para comprobar que todo discurre correctamente con la familia.
    El presidente de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Guadalajara, José María Morales, asegura que todos los niños vienen “bien”, aunque suelen tener anemia y raquitismo, por lo que los meses que pasan en España son una buena medicina. Aquí suelen engordar entre tres y ocho kilos.  
    
“Gratificante”
Morales es un veterano en la acogida a niños refugiados saharauis. Lleva años dando una oportunidad a estos pequeños. En este 2016, por sexto año consecutivo, ha recibido en su familia a un niño, que debido a su edad será el último año que venga. Morales asegura que la experiencia es “bastante beneficiosa,productiva y gratificante”, y añade que conviviendo con ellos “recuerdas valores” que en nuestra sociedad parecen olvidados. El presidente se muestra orgulloso al describir cómo el niño que tienen acogido “se desvive” por su hija biológico, de corta edad.
    Reconoce que durante los primeros días les cuesta adaptarse, pues el idioma y, por tanto, la comunicación no es tan fluida, pero una vez que adquieren mayor agilidad no tienen problemas. Morales apunta que “vienen bastante bien educados”.

Programa Madrasa
De cara al próximo curso, el presidente quiere poner en marcha el Programa Madrasa. Este supondría que los niños pudieran quedarse en la provincia durante el invierno para estudiar, y en el verano se marcharían al Sahara. Sería una acogida temporal siempre que la familia diera el permiso. Este programa está en marcha en numerosas provincias de España, pero, en caso de que salga adelante, Guadalajara sería la primera de Castilla-La Mancha en contar con él.