Valerio: “Espero que la mayoría apueste por esa España que quiere avanzar y mirar al futuro”

26/04/2019 - 10:44 R.San Millán/ D.Pizarro

La ministra y candidata del PSOE al Congreso por Guadalajara asegura que la “única encuesta válida” es la del domingo

Con su labor al frente del Ministerio de Trabajo durante los últimos 10 meses como muestra, Magdalena Valerio afronta como cabeza de lista del PSOE de Guadalajara al Congreso de los Diputados la recta final de la campaña electoral.  Lo hace con ilusión y confianza, pero convencida de la necesidad de una gran movilización alrededor de las fuerzas de izquierda.

 

Llega al final de una campaña tras recorrer muchos puntos de la provincia.

He intentado llegar al máximo de lugares posibles con actos no muy grandes. Y el que haya cogido la Semana Santa en medio, y la decisión del PSOE de que no hubiera actos esos días, ha servido para realizar encuentros con los compañeros y dar una vuelta por distintos sitios. Recientemente he ido a actos a Humanes, Marchamalo, Azuqueca u Orea, en el que se celebró un encuentro muy interesante sobre desarrollo rural de la asociación SOS Mundo Rural… En general ha sido una campaña para hablar de tú a tú con las personas.

Vuelve a encabezar la candidatura al Congreso por la provincia.

Es una gran responsabilidad y un agradecimiento eterno a los compañeros de Guadalajara y a los del Comité provincial que decidieron apoyar las listas por unanimidad. La unión hace la fuerza y un partido unido en el que estemos remando todos en la misma dirección, es fundamental para afrontar el reto que tenemos por delante: las elecciones de ahora, del 28 de abril y las del 26 de mayo.

¿Es de las que cree que estas elecciones serán las más trascendentales de los últimos años?

Es una campaña especialmente decisiva. Porque hay momentos de la historia de España, de todos los países en general, que son cruciales. Ahora estamos en un momento complejo a nivel internacional por la situación en EEUU, la actitud de Trump, el Brexit, Bolsonaro en Brasil, la presión de China desde el punto de vista económico y comercial... Y algunas fuerzas políticas están cuestionando ya no solamente el presente, sino el futuro de la Unión Europea. Son fuerzas de extrema derecha y también de extrema izquierda las que cuestionan nuestro modelo de Estado de Bienestar, de esa unión y ese pilar europeo de derechos sociales. Así que sí, estamos en un momento muy determinante de la historia de Europa en general y de España en particular. Y, ahora, la ciudadanía de a pie va a tener que decidir en las urnas qué modelo de sociedad quiere: si uno que apueste por reforzar los cuatro pilares del Estado de Bienestar e ir incrementando derechos y libertades públicas; o una España que retroceda, mire hacia atrás y cuestione el modelo de organización territorial y el modelo de Estado de Bienestar. Estamos en esta encrucijada. Espero que la mayoría de la ciudadanía apueste por esa España que quiere avanzar y mirar hacia el futuro.

¿Y qué propone el PSOE de Pedro Sánchez?

Para resumirlo, poner la economía al servicio de las personas y no las personas al servicio de la economía. Nos avala una trayectoria de Gobierno en este país en el pasado y de gobierno en el presente. Diez meses que no han sido muchos, pero creo que muy intensos y muy densos, en cuanto a que en poco tiempo nos hemos planteado recuperar multitud de derechos perdidos, de derechos arrebatados por los recortes sociales que había practicado el PP en sus siete años de gobierno. Nosotros proponemos un modelo de economía al servicio de las personas y gestionar la economía con seriedad, desde luego cumpliendo las directrices que nos marca la UE de control de la deuda y del déficit. De hecho, el año pasado cerramos con el 97 por ciento de deuda y el 2,6 por ciento de déficit, cuando partíamos del 3,1. Eso significa que, en el tiempo que hemos estado gobernando, para nada se ha disparado el déficit ni la deuda, como nos está acusando el PP. El PSOE ha realizado un control de la economía, pero poniendo la economía al servicio de las personas. En 10 meses se han recuperado muchos derechos perdidos, aunque hay algunos que no hemos podido recuperar, así como algunas libertades públicas, como eliminar la ley mordaza o regular la eutanasia. Ha sido así sencillamente porque el PP y Ciudadanos nos han ido parando iniciativas legislativas en la mesa del Congreso. Lo que planteamos ahora es seguir en esta senda de recuperación y consolidación de derechos y libertades públicas y desde luego con una gestión económica solvente y con cabeza.

 

¿Siente la reforma laboral y de pensiones como dos espinitas clavadas?

Voy a ser sincera. Son dos espinitas que me llevo clavadas. Parafraseando al cómico manchego José Mota, tengo ansia viva de hacer lo más posible. Soy muy insaciable en ese sentido. Me había planteado un montón de objetivos en el Ministerio, y me voy a quedar con lo positivo. Algunos de ellos, unos cuantos, los he llevado a cabo rodeada de un equipo y con el liderazgo de Pedro Sánchez, que desde luego me iba marcando los deberes. El presidente es de trabajar en equipo y también de hacer seguimiento de todas las cuestiones que tenemos entre manos en cada ministerio. Me siento muy orgullosa, por ejemplo, porque la subida del salario mínimo dignifica la vida de más de dos millones de trabajadores, además de que supone un incremento de las cotizaciones. Así que viene bien para los trabajadores, pero también para la Seguridad Social. También hemos puesto en marcha el plan director por un trabajo digno, con muy buenos resultados en la lucha contra el empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social. Estoy igualmente orgullosa de haber puesto en marcha el Plan Reincorpora-T o el Plan de Choque por el empleo joven, o de haber adoptado una serie de medidas en materia de Seguridad Social, como la regulación de la jubilación parcial o el contrato de relevo en la industria manufacturera, el subsidio de mayores de 52 años, la recuperación de las cotizaciones de las cuidadoras de la Ley de Dependencia… Pero se ha quedado pendiente ese reto de suprimir los aspectos más lesivos de la reforma laboral. Por cierto, de los cuatro temas pendientes, el control de la jornada de trabajo sí se ha incluido en un decreto ley. En cuanto a los otros tres asuntos, estaba a punto de cerrarse un acuerdo, pero la convocatoria de las elecciones lo impidió.

¿Confía en poder retomar estos asuntos?

Los abordaremos en la siguiente oportunidad que tengamos después de las elecciones. Y también apostaremos por un estatuto de los trabajadores. Y en cuanto a las pensiones, estuvo a punto de caramelo de llegar a un acuerdo, tanto en el Pacto de Toledo, con esa renovación de las recomendaciones, como en la mesa de diálogo social. Pero la convocatoria electoral hizo que algunos partidos empezasen a poner problemas. Podemos, PP y Ciudadanos aprovecharon la coyuntura. UGT, CCOO y el Gobierno querían llegar a un acuerdo, mientras que CEOE-Cepyme también prefería hacerlo después de las elecciones. Así que espero que la ciudadanía nos permita seguir gobernando y aprobar esas asignaturas pendientes.

Actualmente es necesaria más que nunca una política de pactos. Su gobierno lo ha tenido difícil estos 10 meses, pero ¿cree que les ha servido de práctica para saber lo que se puede hacer si los ciudadanos le dan confianza, aunque no la suficiente para gobernar en mayoría? 

Estos 10 meses han sido un ejercicio de ser consciente de la importancia del diálogo y del intento de acuerdo para sacar adelante cuestiones importantes para el país. De hecho, con 84 diputados hemos sido capaces de sacar adelante 22 leyes y 35 reales decretos leyes que han regulado multitud de aspectos. Y en algunos casos con apoyo del PP y de Ciudadano, logrando cuasi unanimidad de los 350 diputados del congreso. A veces se han abstenido sabiendo que Podemos iba a votar en contra, porque directamente se lo han pedido los responsables del sector del automóvil o los empresarios de CEOE, como sucedió con un decreto de apoyo a la industria. La verdad es que hemos podido ejercitar un gobierno con una minoría parlamentaria y ser capaces de sacar adelante muchas normas que han implicado decisiones muy positivas para la inmensa mayoría de ciudadanos de este país. Y ahora tenemos ese rodaje y somos conscientes de que queremos el mejor resultado posible. Por ello, el 28 de abril nos planteamos un pacto con la ciudadanía para conseguir el mayor número de diputados posibles y tener una base sólida sobre la que construir un gobierno del PSOE con independientes de izquierda, como ha sido el gobierno actual.

Las encuestas dan a su partido como favorito. ¿Esto es bueno o malo?

Yo lo tengo meridianamente claro. Últimamente, los vaticinios de las encuestas, con todos mis respetos a los que se dedican a hacerlas, no están muy acertados. No acertaron en Estados Unidos, el Brexit no iba a salir y al final sí, y en Andalucía, por poner un ejemplo reciente, tampoco acertaron mucho, pues le daban dos o tres diputados a Vox y finalmente fueron 12. La única válida es la del 28 de abril, donde la ciudadanía se retrata. Pero está la cara y la cruz. La cara es que anima, pero se han dado casos de personas que estaban muy animadas porque estaban ganando en las encuestas, como pasó a Rivera o a Iglesias, pero luego se cierran los colegios electorales y ésa es la hora de la verdad. Por otro lado, el que vayan bien las encuestas puede ser disuasorio del voto. Y no sobra ningún voto. Hay una opción de que las tres derechas se coaliguen. Además, es peligroso que PP y Ciudadanos cada vez se escoran más a la extrema derecha por la competencia de Vox, y para este país, que gobierne la derecha escorándose hacia la extrema derecha, puede significar un retroceso en materia de derechos y libertades.

¿Cree que el problema de los indecisos se resuelve con una alta participación?

Una parte de los indecisos no están indecisos, solamente que no quieren decir qué van a votar. Pero es verdad que la participación les va a venir muy bien a los partidos de izquierda. Así que pido a todos los progresistas que voten el día 28, porque es la única manera de parar a la derecha como se para a cualquier formación política en una democracia, en las urnas. Animo a que haya una participación grande, y cuidado en provincias como la nuestra. Creo que aquí hay una posibilidad cierta, sin lanzar las campanas al vuelo, de que el PSOE pueda conseguir dos diputados y tres senadores, cosa que no ocurre desde 1982.

El PSOE de Guadalajara tiene la suerte de contar con una ministra y candidata para la campaña. ¿Ha participado en actos también fuera de la provincia?

Estoy teniendo actos por toda España, pero desde que mis compañeros me eligieron para ser cabeza de lista, he participado en muchos aquí. Aunque una es ministra de toda España, siempre se tiene un plus de cariño y dedicación a su región y provincia, en este caso a Castilla-La Mancha y Guadalajara. También me han reclamado mucho de Extremadura, mi lugar de origen, donde nací hace ya varias décadas. Pero me he movido por toda España desde que llegué al ministerio y también presentando candidatos. Tengo varias presentaciones de candidatos que, no obstante, he pospuesto para después de las elecciones. Y es que estamos encadenando las dos campañas.