Arena para limpiar las infraestructuras de la capital
De entre todas las técnicas de limpieza, la más efectiva es la que emplea arena a presión, cuya finalidad es eliminar restos de óxido o pintura de superficies u objetos. Este método se está usando para restaurar la pasarela sobre el Barranco del Alamín.
Esta forma de trabajo se conoce en el mundo como sandblasting, aunque también como técnica del granallado, chorreado abrasivo o arenado. El chorro de arena se lanza a presión para eliminar la suciedad más difícil y, a la vez, lijar la superficie. También se utiliza para eliminar pinturas en mal estado o corrosiones.
Otro de los beneficios del uso de esta técnica es que previene la oxidación y disminuye los daños provocados por la fricción que son habituales en otros métodos de limpieza.
Las obras de reparación de la estructura de esta pasarela, que une la plaza de España de Guadalajara, con la glorieta Retén de Cogolludo, “avanzan dentro de lo previsto y estarán acabadas en mayo”, según detalla el primer teniente de alcalde y concejal del área de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Guadalajara, Rafael Pérez Borda.
Después de años de abandono de esta infraestructura, la Concejalía de Urbanismo solicitó un estudio detallado del estado de la misma al principio de la legislatura, lo que arrojó unas deficiencias graves que obligaron a redactar un proyecto de reforma integral de la misma.
"El cierre de la pasarela se decidió durante la acometida de unos trabajos de mantenimiento en los travesaños de madera el verano pasado, donde se detectaron graves problemas de corrosión, lo que suponía un riesgo para la seguridad de los usuarios", destaca el primer teniente de alcalde, quien añade que "no volverá a ocurrir una dejadez tal y garantizaremos el correcto mantenimiento de esta y otras infraestructuras de la ciudad".
