Cabanillas aprueba una bajada general del IBI del 12%, y la práctica eliminación de la ‘Plusvalía Post Mortem’
Salen por unanimidad las dos modificaciones fiscales propuestas por el Equipo de Gobierno.
El Ayuntamiento de Cabanillas ha aprobado este miércoles dos importantes bajadas de impuestos que afectan al conjunto de los vecinos de la localidad con viviendas en propiedad. Por un lado se ha aprobado una reducción del 12% del Impuesto de Bienes Inmuebles, la conocida popularmente como “contribución”, al reducirse el canon municipal (la parte del impuesto que depende exclusivamente del Ayuntamiento, dado que el resto viene tasado por el Catastro) desde el 0'50 al 0'44. Además de esta bajada de impuestos, también se ha modificado la Ordenanza Fiscal municipal que regula el conocido como “impuesto de plusvalía post mortem”, un impuesto estatal pero de aplicación municipal, que hasta la fecha estaba bonificado en un 50%, y pasa a estarlo en un 95%, el máximo que permite la Ley.
Ambas propuestas han sido elevadas a pleno por el alcalde de Cabanillas y concejal de Economía y Hacienda, José García Salinas, y han contado con la unanimidad de los grupos municipales. Salinas ha explicado que, en el caso del IBI, la medida afecta a las viviendas, pero no a las edificaciones de carácter industrial, y ha recordado que con esta reducción de impuestos se da cumplimiento a un compromiso electoral adquirido por el PSOE en las últimas Elecciones Municipales. “La situación económica del Ayuntamiento está saneada, hemos cerrado los dos últimos ejercicios con superávit, hay equilibro presupuestario, y hay dinero en caja. Como además el Gobierno central sigue impidiéndonos invertir o mejorar algunos servicios, al no modificar las leyes que fijan los techos de gasto, lo natural es que esta situación redunde en una reducción de la presión fiscal a los vecinos”, ha manifestado Salinas durante la sesión plenaria. La medida ha contado con el respaldo explícito del resto de grupos politicos, aunque desde IU su portavoz ha reiterado la posición de su partido de que el impuesto del IBI debería ir ligado al nivel de renta de las familias, lamentando que la Ley no lo permita.
Amortización de otros 500.000 euros de deuda
Relacionado también con la situación económica, el Pleno ha aprobado dos modificaciones de crédito al presente presupuesto, para incluir en el mismo parte del superávit de 3 millones de euros con el que se cerró el ejercico de 2016. La cuantía más importante, 505.202 euros, se va a destinar a seguir amortizando deuda bancaria, dado que de nuevo la normativa estatal impide dedicarlo a inversiones porque se superaría el techo de gasto. El punto se ha aprobado con la unanimidad de todos los grupos políticos. Cabe señalar que, tras esta nueva amortización, la deuda bancaria a largo plazo del Ayuntamiento de Cabanillas ha quedado en parámetros que permitirán con seguridad dejarla a cero a finales de este año, o comienzos de 2018.
También se ha aprobado por unanimidad otra modificación de crédito, para un gasto en mantenimiento de edificios de más de 20.000 euros que proceden del superávit de 2016. De ellos, algo más de 6.000 euros son para financiar el arreglo de desperfectos y el repintado realizado en el Centro de Salud de la localidad, y el resto, para la instalación de calefacción por fas ciudad (sustituyendo al sistema de bombonas) en el Colegio San Blas.
Cabe reseñar finalmente, también en el apartado económico, que el Pleno ha aprobado, con los votos de PSOE, IU y Vecinos por Cabanillas, y el voto en contra del PP, una moción presentada conjuntamente por los tres primeros grupos en la que se insta al Gobierno central a que modifique de una vez la normativa que constriñe el gasto a las corporaciones locales, aun teniendo situaciones saneadas, como es el caso de Cabanillas del Campo. La moción está recogida de una propuesta lanzada por la FEMP a todas las corporaciones locales, y en ella básicamente se exige al Ministerio de Economía que permita a los Ayuntamientos destinar sus superávit a inversiones necesarias para los vecinos, “sin más restricción que la estabilidad presupuestaria”.
El Grupo Popular ha asegurado estar a favor del fondo de la petición, pero ha votado en contra argumentando que ya hay un grupo de trabajo en el Senado estudiando esta cuestión. Los populares han presentado una enmienda a la moción en la que pedían que se cambiara la redacción de la misma, para solicitar al citado grupo celeridad en sus conclusiones, pero el resto de grupos no ha aceptado el cambio del texto, y la moción se ha aprobado según estaba inicialmente planteada.