
Conexión Alcorlo-Beleña: Garantía de agua para medio millón de habitantes de Corredor y Campiña
En las últimas décadas, la creciente demanda de agua en el Corredor del Henares y la Campiña, impulsada por el crecimiento poblacional e industrial, ha puesto de manifiesto la necesidad de optimizar la gestión hídrica en la cuenca del río Sorbe y su conexión con el río Bornova, a través de sus embalses de Beleña y Alcorlo, con capacidades de 53 hm3 y 180 hm3 respectivamente, piezas clave en esta ecuación, gracias a las aportaciones desde ambas cuencas.
En diciembre de 2023 Nueva Alcarria se hacía eco de este espectacular desembalse a pie de la presa de Beleña, con un caudal de 10m³/s al río Sorbe.
Al mismo tiempo, el riego en las áreas agrícolas del Bornova sigue siendo una prioridad, lo que refuerza la urgencia de soluciones que permitan gestionar de manera más eficiente los recursos disponibles. Desde enero de 2024, se ha registrado un número grande de desembalses en la presa de Beleña. Este excedente de agua, que actualmente no puede ser aprovechado por falta de infraestructura para trasvasarlo al embalse de Alcorlo, podría ser crucial para mitigar los efectos de las sequías recurrentes. Estas sequías impactan de forma importante tanto en el suministro humano y el uso industrial como en el agrícola, donde las restricciones de agua son cada vez más comunes. Una conexión directa entre ambos embalses permitiría una mejor redistribución de los recursos hídricos, garantizando la seguridad del suministro en los momentos más críticos.
C-LM se está reuniendo con el Estado para incluir la conexión Sorbe-Bornova en la planificación hidrológica.
Hace años se completó la conexión desde el embalse de Alcorlo hacia el río Sorbe, lo que representa un avance significativo en la gestión de los recursos hídricos en la región. Sin embargo, el proyecto inverso, que buscaba llevar agua desde Beleña a Alcorlo, se encuentra paralizado desde hace más de una década. Este proyecto, presentado inicialmente por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), había sido evaluado como la solución más viable desde las perspectivas técnica, ambiental y económica. No obstante, en 2011, un informe de impacto ambiental negativo publicado en el BOE el 24 de febrero argumentó que las medidas correctoras propuestas no garantizaban la protección de la fauna y la biodiversidad. Esta resolución, emitida por la Secretaría de Estado de Cambio Climático, detuvo indefinidamente el proyecto.
Complejidades
Posteriormente, la situación se complicó con la aprobación de la Ley 5/2011, de 10 de marzo, que declaró el Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara. Esta legislación prohibió expresamente la construcción de nuevas infraestructuras hidráulicas dentro del parque, limitando aún más las opciones para desarrollar el proyecto. Sin embargo, modificaciones recientes en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del Parque Natural han reabierto la posibilidad de retomar esta obra. Estas modificaciones permiten reconsiderar la construcción de la infraestructura bajo nuevos criterios, siempre que se asegure un impacto ambiental mínimo.
Cauce del Bornova.
A pesar de los obstáculos legales y ambientales, el debate sobre la viabilidad de esta conexión sigue vigente. Los expertos coinciden en que, para garantizar un abastecimiento hídrico sostenible en la provincia, es imprescindible abordar el proyecto desde una perspectiva moderna que incluya tecnologías sostenibles y un enfoque integral. Esto incluiría la realización de nuevos estudios de impacto ambiental que ofrezcan garantías sólidas para la protección de la biodiversidad y de los ecosistemas acuáticos. Además, la colaboración entre administraciones locales, regionales y nacionales, así como la posible participación de fondos europeos, será fundamental para superar las barreras económicas y administrativas que han impedido su ejecución hasta ahora.
El pantano de Alcorlo, que alberga el agua procedente del río Bornova, tiene la finalidad principal de abastecer a los riegos del entorno.
La CHT ya se decantaba en 2010 por la alternativa que sus técnicos consideraban menos dañina para el medio ambiente. Un kilómetro y medio aproximadamente, más arriba del Pozo de los Ramos, en la zona de la Huelga, se construiría un azud que regularía la derivación del caudal hacia Alcorlo. El punto de destino será el arroyo Rihondo. El agua del Sorbe llegará hasta este punto a través de un túnel de unos diez kilómetros de longitud, que seguiría y aprovecharía la pendiente natural del terreno. Cuando el embalse de Beleña esté al límite de su capacidad este nuevo azud se llenará y empezará a derivar agua hacia Alcorlo. Éste tiene capacidad para acoger cuatro veces más de agua que Beleña.
Enclavado en el cauce del río Sorbe, entre la sierra de Ayllón y la sierra de Alto Rey, trasvasa las aguas del río Sorbe hasta el canal del Jarama a través de un túnel de 6,5 metros cúbicos por segundo de capacidad efectiva. La aportación media anual del río en este punto es de ciento sesenta y dos millones de metros cúbicos.
Esta iniciativa se complementaría con la conexión del pantano de Alcorlo con la potabilizadora de Mohernando, ya en marcha. Se trata de 33 kilómetros cuya misión es apoyar el abastecimiento de Beleña cuando este embalse se encuentre bajo mínimos, sustituyendo así el bombeo desde el Canal del Henares que había previsto en casos de emergencia.
El Río Sorbe es el que suministra agua al pantano de Beleña, que, con sus 53 hectómetros cúbicos de capacidad, se encarga de abastecer al Corredor del Henares y áreas adyacentes.
Mientras tanto, la situación hídrica en el Corredor del Henares y sus alrededores sigue siendo un desafío constante. La implementación de medidas para mejorar la eficiencia en el uso del agua, tanto a nivel doméstico como industrial y agrícola, será clave para mitigar los efectos de las sequías mientras se definen soluciones estructurales de mayor alcance. Campañas de concienciación y educación, así como incentivos para la adopción de tecnologías de ahorro de agua, podrían marcar una diferencia significativa en el corto plazo.
La Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (APAG) y la patronal (CEOE-CEPYME) reclaman la conexión Sorbe-Bornova.
La necesidad de garantizar un suministro hídrico confiable y sostenible en Guadalajara y sus alrededores no es solo una cuestión de infraestructura, sino también de visión y compromiso colectivo. La conexión entre el embalse de Beleña y la conducción Alcorlo-Mohernando, aunque actualmente detenida, sigue representando una oportunidad única para optimizar la gestión de los recursos hídricos. Con una planificación adecuada y un enfoque equilibrado entre el desarrollo y la conservación ambiental, esta obra podría convertirse en un modelo de gestión hídrica sostenible que inspire soluciones similares en otras partes de España.