DESCUBRIENDO LA PREHISTORIA DE GUADALAJARA: Cazadores-recolectores en la Edad de Hielo en Embid

07/10/2023 - 18:50 Paco Campos

En la provincia de Guadalajara, en Embid, en el valle del Río Piedra, en las lindes de la provincia de Zaragoza, se ha desenterrado un fascinante yacimiento arqueológico que arroja nueva luz sobre la historia de los cazadores-recolectores que habitaron esta región en tiempos extremadamente fríos durante la última Edad de Hielo.

Un equipo de investigadores interdisciplinarios, liderado por el Área de Prehistoria de la Universidad de Alcalá y el Geoparque Mundial Unesco Comarca de Molina-Alto Tajo ha dado a conocer estos descubrimientos en un artículo publicado en la revista PLOS ONE, publicado el pasado 4 de octubre. Estos hallazgos están redefiniendo nuestra comprensión de las estrategias de movilidad, asentamiento y uso del territorio por parte de los cazadores-recolectores del Paleolítico superior en la Península Ibérica. Se trata de Javier Aragoncillo-del Río, José-Javier Alcolea-González, Luis Luque, Samuel Castillo-Jiménez, Guillermo Jiménez-Gisbert, José-Antonio López-Sáez, José-Manuel Maíllo-Fernández, Mónica Ruiz-Alonso, Ignacio Triguero, José Yravedra y Manuel Alcaraz-Castaño. 

Hasta hace poco, la creencia común en la comunidad científica era que las regiones interiores de la Península Ibérica eran evitadas por los grupos humanos durante los periodos más fríos de la última glaciación, que abarcaron desde hace 7.350 hasta 1.170 años atrás. Esta suposición se basaba en las condiciones ambientales extremas causadas por el clima continentalizado de las tierras altas.

Sin embargo, recientes excavaciones en el abrigo de Charco Verde II, ubicado en el valle del río Piedra en Embid, han desafiado esta idea convencional. Los resultados de estas excavaciones sugieren que las tierras altas del interior de la Península Ibérica no fueron sistemáticamente evitadas durante las fases frías del Paleolítico superior.

El abrigo de Charco Verde II, situado en una región fría y árida a unos 1.050 metros sobre el nivel del mar, reveló una secuencia de ocupaciones de cazadores-recolectores con tecnologías magdalenienses. Estos hallazgos abarcan ocupaciones durante algunos de los periodos más fríos de la última glaciación, como el Último Máximo Glacial hace unos 21.000 años y el Evento de Heinrich 1, que ocurrió entre 18.000 y 16.000 años atrás.

Los datos paleoambientales obtenidos en el yacimiento, incluyendo muestras de restos polínicos, maderas carbonizadas y sedimentos, confirman que el paisaje durante estas ocupaciones era extremadamente frío y árido. Estos cazadores-recolectores no solo sobrevivieron en estas condiciones desafiantes, sino que también establecieron asentamientos duraderos.

Riqueza Arqueológica:
El material arqueológico recuperado en Charco Verde II incluye herramientas de industria lítica tallada, utensilios fabricados a partir de materias duras animales, elementos de adorno como conchas perforadas y moluscos, como el 'dentalium'. Estos hallazgos proporcionan una visión fascinante de la vida cotidiana de estos antiguos habitantes de Guadalajara.

El descubrimiento de Charco Verde II desafía nuestras percepciones previas sobre la adaptación humana a entornos extremos durante la última Edad de Hielo en la Península Ibérica. Estos cazadores-recolectores no solo sobrevivieron en condiciones adversas, sino que también establecieron comunidades duraderas en una región que antes se creía inhóspita. Este emocionante hallazgo arqueológico continuará arrojando luz sobre la historia antigua de Guadalajara y la capacidad humana para adaptarse y prosperar en entornos desafiantes.

Fuente: Revista Plos