Dinero y salud

El día de la Lotería Nacional se ven por televisión manifestaciones de jolgorio y alegría porque la bolita con su número ha tenido a bien salir premiada y cada día serán, a nivel ya más privado, muchas las euforias que vivan los que ganen en algún tipo de sorteo o apuesta de las que hay. El juego es una forma rápida de ganar dinero, aunque el porcentaje de posibilidades es ínfimo y crea adicción, hasta lleva a muchos a la ruina cuando no saben o pueden hacerlo en su justo punto. Tal vez debería regularse más las publicidades invasivas que vemos en televisiones y radios. Debería controlarse más, porque todos necesitamos o ansiamos ganar dinero. Muchas son las frases que sobre el dinero han escrito pensadores y escritores. También el Refranero se ha hecho eco de la cuestión, con frases como “Mal suena el don sin el din” o “Dios reina en el cielo y el dinero en la tierra” aunque no olvida advertir con que “No hay nadie tan rico que no necesite un buen vecino” o aquello de “El dinero no puede hacernos felices, pero es lo único que nos compensa de no serlo”. Pronto supo el hombre los medios que había para tener dinero; uno robar, no muy fácil, peligroso y sucio; otro, trabajar, limpio pero difícil y premioso; otro, el mejor, que es mitad y mitad, los negocios, al que añadimos el juego. Recordamos también la frase de que “El dinero estará siempre mal distribuido, porque nadie piensa la manera de distribuirlo, sino en la manera de quedárselo todo”. León Daudí, entre otras cosas afirmaba: “En la vida hay muchas cosas más importantes que el dinero, pero todas cuestan mucho dinero”. Para terminar porque sería interminable citaremos a Horacio que escribe: “Procúrate dinero; si puedes, procúratelo honradamente; si no, procúratelo de cualquier modo”. Muchas y discutidas frases con las que no se puede estar de acuerdo por ingeniosas que nos parezcan, pero sirven para ilustrar un poco lo que del dinero o su falta puede o se suele opinar. Pero cuando vemos, incluso antes, por supuesto, que la fortuna no ha venido con el tantas veces ansiado dinero… entra en acción la otra frase o deseo que prima o debe primar incluso por encima del dinero: la salud. Lo peor o lo mejor es que no son excluyentes, se puede aspirar a tener salud y dinero y amor, como dice la canción. Sólo una frase en cuanto a la salud se refiere, pues el espacio se agota: “Come poco y cena más poco, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago.