El medio millar de venezolanos que viven en Guadalajara, pendientes de la crisis del país

12/02/2019 - 12:53 D.Pizarro

Zuleica Martínez lleva tres meses esperando para tramitar sus papeles.

La crisis política, económica y humanitaria de Venezuela ha hecho que se haya incrementado en los últimos años el número de nacionales que han llegado a la provincia de Guadalajara. Actualmente, los venezolanos representan apenas el 1,61 por ciento de los extranjeros residentes en Guadalajara. Son 502 los vecinos de la provincia que proceden de aquel país latinoamericano. Sin embargo, esta cifra supone un incremento considerable si echamos la vista atrás 20 años. Porque en 1998, según datos del Instituto Nacional de Estadística, estaban empadronados en algún municipio de Guadalajara un total de 16 venezolanos. En 2010, esa cifra había pasado a 247; en 2017, había 373; y, finalmente, en 2018 se llegó a 502. 

Cuatro  meses en la capital

Zuleica Martínez es una de ese medio millar de venezolanos que han elegido Guadalajara para iniciar una nueva vida. Esta mujer de 27 años llegó hace apenas cuatro meses a la capital guadalajareña, acompañada por su hijo de cuatro años. Sus razones para abandonar el país que la vio nacer son claras. “Me fui por todo, por la situación que se vive, por la falta de comida y medicinas…”. Martínez salió del país sin problemas al contar con el pasaporte en regla. Aquí la esperaban su padre y sus dos hermanos, que viven en Guadalajara desde hace algo más de año y medio. 

Finalmente, en septiembre consiguió aterrizar en España y llegar a Guadalajara. Lo primero que hizo fue escolarizar a su hijo y comenzar el tortuoso camino para conseguir regularizar su situación. “Siguiendo los consejos de mi padre, me acerqué a la comisaría para pedir la protección internacional por asilo, pero ya en septiembre me dieron cita para el mes de marzo”. Por ello, aún no puede buscar trabajo de forma legal, sino ofrecerse para trabajar en el cuidado de ancianos o niños y en labores domésticas. “Todavía no tengo el número de identificación, algo que te piden en cualquier sitio a la hora de hacerte un contrato”. Una vez que consiga ese documento, podrá buscar un empleo acorde a su formación, dado que en su país era administrativa en el Ministerio de Educación. Lo que tiene claro Zuleica Martínez es que no volverá a su país. “No puedo, y menos con un niño pequeño. Hay muchas muertes. Es muy triste, pero ni siquiera sé si con la ayuda internacional se va a solucionar”.

En cuanto al autoproclamado presidente Juan Guaidó, esta mujer prefiere ser prudente. “Aunque consiguiera echar a Maduro, el país está muy mal, por lo que para que se levantara harían falta varios años”.