Elizabeth y España (y IV)
En octubre de 1988 Isabel II realizó su única visita oficial a España. Lo hizo acompañada de su marido, estuvieron en Madrid, Barcelona, Sevilla y Mallorca.
La personalidad de Elizabeth II y el respeto general que concita le han permitido superar toda clase de situaciones adversas, aprobando con nota alta. Sus jubileos de plata, oro, diamante y zafiro fueron celebrados en 1977, 2002, 2012 y 2017. Y parece no querer jubilarse, a diferencia de su esposo, el duque de Edimburgo, que en agosto de 2017, a los 96 años, pasó revista a las tropas de la Real Marina británica en el que fue su último compromiso oficial como miembro de la familia real.
En 1961, cuando John Fitzgerald Kennedy y Jackie visitaron Gran Bretaña, Felipe le dijo a la hermana de la primera dama estadounidense que ella era como él pues, como consorte, caminaba 3 pasos por detrás de la reina.
Felipe de Edimburgo durante sus 99 años de vida desarrolló en solitario 22.000 actos públicos y, después de jubilarse, decidió seguir apoyando a las 780 organizaciones a las que había ayudado. En su larga vida destacó por su elegancia, pues siempre mostró su preocupación por la forma de vestir, y por su afición a los caballos. Y, desde los 96 años, se dedicó a la lectura y a la pintura. Él presumía de ser la persona que mejor descubría las placas de las inauguraciones.
La fortuna del duque de Edimburgo se cifra en doce millones de euros. Cuando se casó no tenía nada a pesar de ser miembro de la realeza por nacimiento y, las únicas joyas que su madre, Alicia de Battenberg, pudo sacar de Grecia, las emplearon para sellar el compromiso de petición de mano de la futura reina. A la boda Alicia fue vestida de gala, pero no a la coronación en 1953, donde ya acudió con el hábito de monja.
Al enterarse del fallecimiento del duque de Edimburgo, los Reyes de España, don Felipe y doña Letizia, enviaron un telegrama expresando su dolor por la muerte del tío Philip, y mostrando las condolencias a la viuda, la tía Lilibeth. En julio de 2017 don Felipe y doña Letizia estuvieron en Londres, de visita oficial. Y, 31 años antes, habían cruzado el Canal de la Mancha don Juan Carlos y doña Sofía. Las relaciones entre las dos familias han sido cordiales. No en vano, los cuatro: Isabel II, Felipe de Edimburgo, Juan Carlos I y Sofía son tataranietos de la reina Victoria, la emperatriz de la India. Alfonso XIII se casó en Madrid el 31 de mayo de 1906 con Victoria Eugenia de Battenberg y, en 1933, don Juan de Borbón, padre de Juan Carlos, se enteró de que era el depositario de los derechos dinásticos por decisión de Alfonso XIII estando en un yate británico. Por otra parte, están los lazos griegos que unen a Sofía con su tío segundo Felipe.
El único momento en que ha habido un intervalo amargo en la diplomacia fue a raíz de la boda de Carlos de Inglaterra con Lady Diana. El enlace tendría lugar en Londres el 29 de julio de 1981. Don Juan Carlos y doña Sofía iban a asistir, pero el monarca canceló la presencia de ambos cuando se enteró de que los novios iban a hacer en Gibraltar la primera escala de su luna de miel. No obstante, Buckingham aclaró que no se trataba de una decisión política, sino de una cuestión privada, pues la pareja iba a desarrollar un crucero por el Mediterráneo. Y, pronto, las aguas volvieron a su cauce,pudiéndose encontrar numerosas fotografías de la estancia de Carlos y Diana, con sus hijos William y Harry, en Marivent, en agosto de 1987.
En octubre de 1988 Isabel II realizó su única visita oficial a España. Lo hizo acompañada de su marido, estuvieron en Madrid, Barcelona, Sevilla y Mallorca. Vieron Las Meninas en el Museo del Prado y las construcciones para los juegos olímpicos en Barcelona. La anécdota la protagonizó nuevamente Isabel que, después de ver el prototipo de la mascota Cobi, pidió camisetas para sus nietos.