“Hay que defender la alegría”

20/04/2023 - 19:19 FCV

Beatriz Corral pertenece a la Unidad de Fisioterapia del centro materno-infantil de Azuqueca. A juicio de esta profesora asociada de Ciencias de la Salud en la Universidad de Alcalá, es más importante que el paciente comprenda lo que sucede y que pierda el miedo a moverse. La clave es “generar una alianza pediátrica”, precisa. Nos expone las claves para, como asegura citando a  Benedetti, “defender la alegría”.

“La labor que llevamos a cabo es la de promover hábitos saludables, prevenir la enfermedad, educación para la salud y actividades que redunden en una mejora funcional y adaptación de actividades al perfil de los pacientes que en un 95% llegan con dolor persistente”, señala.

Corral ha diseñado un decálogo de intervención que “consiste en la creación de una experiencia de movimiento, más allá de que sea terapéutica”. Se trata de “empoderar” al paciente y convencerle de que “puede hacer cosas distintas que redunden en una mejora continuada de su funcionalidad, algo que hacemos a medida del paciente, buscando los estímulos adecuados y fomentando la creatividad”.

Toda esta estrategia asistencial, a la vez que preventiva, está enmarcada en un decálogo, que recoge 10 líneas de actuación en la Unidad de Fisiterapia. Gracias al trabajo que se desarrolla, “hay gente con dolor persistente que ha hecho un cambio en su estilo de vida y su perspectiva, tengo un número significativo de pacientes que han mejorado bastante”, ilustra Corral.

Los tratamientos van personalizados, según su conocimiento y posibilidades: “El que es músico hacemos juegos con música, buscamos los estímulos adecuados, que disfruten, que sean creativos, aunque no es recomendable persistir si el paciente no mejora”, prosigue. Todo elaborado a partir de la propia experiencia de la fisioterapeuta. “No vendemos humo, sino que es una estrategia efectiva, todo está basado en evidencias y en la práctica clínica”, continúa.

   

Pero los pacientes tienen que ser muy conscientes que no existen los milagros. “Todo depende de un conjunto de factores, como qué comes o tus emociones, que influyen en las patologías músculo-esqueléticas que nosotros tratamos habitualmente”, asevera.

Y hay otro factor, a su juicio, muy importante, conectar con el paciente, “para lograr una alianza terapéutica”.  La implicación del paciente es fundamental para que la terapia sea un éxito. “En vez de tener que venir 15 días a realizar una serie de ejercicios, le enseñamos una filosofía para perder el miedo a moverse, entender que la conectividad cerebral es importante, que el equilibrio emocional es importante… Se trata de defender la alegría”. Es fundamental “el autocuidado y la humanización para hacer sostenible nuestra salud”. Se trata, en definitiva, de “defender la alegría”.