La cara 'B' de la vida
Hay gente que morirá por el coronavirus pero de miseria.
El hombre es el único ser vivo que sabe que morirá, recordaba un prestigioso paleontólogo en días de Gran Encierro mientras determinados sedicentes políticos buscaban un chivo expiatorio o chiva (covidiotas, segundas residencias, virus de Madrid, Ayuso) a sus desatinos. El resto de los animales, explicaba el experto, lo ignora y vive sin angustia su final inexorable. Es la cara oscura del homo sapiens, precursor de que hasta los listos sean explotados y manipulados por otros más listos. A todo hay quien gana, reza un viejo aforismo en mi pueblo.
Un estudiante avispado preguntó a la antropóloga Margaret Mead cuál consideraba como primer signo de civilización en una cultura. Esperaba que esta pionera en utilizar del concepto feminista de «género» hablara de ollas de barro, pinturas rupestres, piedras de moler o ruedas. Pero no. Defendió que el primer signo de civilización en una cultura antigua era un fémur que se había roto y luego sanado.
La investigadora explicó que si en el reino animal te rompes una pierna, mueres. No puedes huir del peligro, ir al río a tomar algo o buscar comida. Eres carne de bestias que merodean. Ningún animal sobrevive tiempo suficiente para que el hueso sane. Un fémur fracturado que se ha curado evidencia que alguien se ha tomado el tiempo para quedarse con el que se cayó, le ha vendado la herida, llevado a lugar seguro y ayudado a recuperarse. “Ayudar a alguien más en las dificultades es el punto donde comienza la civilización”, sentenció.
Da pavor pensar que lo que ha dado en llamarse «civilización» surgió hace unos diez mil años, y que desde entonces hemos estado progresando para alejarnos de ella. Millones de muertos y desplazados por guerras, bandadas de aves desaparecidas, el zumbido de las abejas que se desvanece, especies que se extinguen, masas oceánicas de plástico del tamaño de dos Españas…
Hay gente que morirá por el coronavirus pero de miseria. Una civilización que se basa sólo en la gran economía no se puede llamar civilización. Estar hablando siempre de PIB, rendimiento e incremento de beneficios no es un modo de vivir. Una patronal ha tachado de “colectivo no productivo” a los muertos en residencias porque frenan el avance en fase ¿Caminamos hacia el fin de la especie?