La clausura de aTempora

Ni los mejores augurios hacían presagiar el 8 de junio el éxito que tendría la exposición que la Junta de Comunidades, el obispado de Sigüenza y el organismo estatal del IV Centenario de Cervantes acababan de inaugurar en la magnífica catedral de la ciudad del Doncel con la que se recordaba el tiempo en que vivieron dos de las principales figuras de la historia de la literatura universal, el citado autor de ‘El Quijote’, y el inglés William Shakespeare, ambos fallecidos en el año 1616, con más de trescientas obras artísticas y culturales a lo largo de cuatro mil metros cuadrados. La afluencia masiva de visitantes a la ciudad de Sigüenza, con los beneficios que ello aporta a la economía local, llevó a solicitar y a ser aceptada por sus responsables la ampliación de la duración de la muestra que en un principio estaba programada hasta el 16 de octubre y que finalmente fue cerrada ayer domingo tras un fin de semana en el que diversos actos han puesto el broche de oro. Más de sesenta mil personas han visto ‘aTempora’ que ha llenado durante este tiempo, a excepción del día de la Procesión de Los Faroles, la casi totalidad de la catedral, uno de los templos jubilares en el Año de la Misericordia. La política, la sociedad, la cultura y el arte sacro del Siglo de Oro han sido exhibidos en una de las diez mejores catedrales de España y en el segundo destino turístico de la región, admirando a cuantos la han contemplado. La bandera arrebatada al pirata inglés Francis Drake durante su incursión a España y Portugal y donada a los fondos de la Catedral fue la justificación de este montaje coordinado por el comisario Alfonso Caballero y que ha contado en el día a día con los voluntarios de la Fundación Ciudad de Sigüenza que la han atendido y guiado, así como con la colaboración del Ayuntamiento seguntino. El impacto logrado hace sugerir futuras colaboraciones de la sociedad civil, las instituciones y la Iglesia para que proyectos de este tipo vuelvan a llevarse a cabo. Enhorabuena a la Fundación Impulsa Castilla-La Mancha, al Gobierno regional, al cabildo catedralicio y al Obispado.