La Comunidad de Propietarios Juan Diges Antón 4 se desvincula del gasóleo e incorpora la Red de Calor de Guadalajara
La Red de Calor de Guadalajara continúa sumando usuarios y, pese a que la campaña de frío ha estado siendo irregular e instable en cuanto al tiempo, “los vecinos de la ciudad saben que cambiar sus sistema de calefacción con un combustible fósil por la red sostenible con energía procedente de la biomasa es una apuesta de futuro y no sólo de presente, los beneficios son numerosos desde el punto de vista técnico, social y medioambiental pero sobre todo económicos, éstos se notan en el bolsillo de los vecinos desde la primera factura”, explica el responsable de la Red en Guadalajara David Gómez.
Esta vez son los 18 vecinos de la comunidad de propietarios Juan Diges Antón 4 los que han decidido conectarse a la infraestructura urbana de calor para la calefacción y agua caliente sanitaria y desvincularse del gasóleo que utilizaban en su sala de calderas.
“Los nuevos usuarios reducirán sus emisiones anuales en 41 toneladas CO2 con el sistema de energía térmica de biomasa, cada contribución al cuidado de la atmósfera cuenta”, puntualiza David Gómez.
Hay que recordar que, entre las ventajas económicas de ser usuarios de la Red, se encuentra un importante ahorro económico en calefacción y Agua Caliente Sanitaria. Reducción media mínima del 10 por ciento en la factura de la Comunidad de Propietarios, sin inversión inicial. Sin derramas para los vecinos, conexión y mínima obra en la sala de calderas. “Estabilidad en el precio con contratos a largo plazo, sin depender del precio del petróleo, gas, ni de oscilaciones del dólar. Hacemos una gestión integral de la instalación. Mantenimiento y garantía de los elementos nuevos instalados. Mantenimiento preventivo de la sala de calderas actual según el RITE. Rendimientos optimizados y eficientes de las instalaciones. Y los vecinos se evitan el coste de cambiar las calderas actuales por otras nuevas porque no se produce desgaste”.
Respecto a las ventajas técnicas, “las calderas actuales permanecen funcionales, constituyen un doble sistema de seguridad como opción de encendido en caso de actuaciones de mantenimiento en la Red. Se evita almacenamiento de combustible, riesgos de fugas, olores, ruidos y materiales inflamables. Y desaparecen descargas de combustibles”. Además, se instala un contador de kilovatios de última generación con la medición y facturación de KWh térmicos útiles consumidos.
“Socialmente podemos hablar de que estamos generando empleo local y revitalizando las zonas rurales, además de apostar por el desarrollo de la provincia de Guadalajara. El 100% del coste de la biomasa se genera y consume en el territorio local, regional y nacional”. David Gómez insiste en que “no podemos dejar de lado las ventajas medioambientales, con una importante reducción de las emisiones de CO2, PM10, NOx, SO2 a la atmósfera. Además de gestionar el Certificado de Eficiencia Energética en cada edificios y vivienda que lo necesite”.
