La Guardia Civil desactiva cientos de bombas que aún quedan de la Guerra Civil
Los miembros del Equipo de Búsqueda y Localización de Artefactos Explosivos (EBYL), perteneciente a la Guardia Civil, desde que se creó a mediados de 2007, han hallado 326 dispositivos en 82 términos municipales de la provincia de Guadalajara. La gran mayoría, al estar activos, se han tenido que desactivar.
Estos datos arrojan una media de una veintena al año, la amplia mayoría relacionados con avisos desde el Servicio de Emergencias de Castilla-La Mancha 112 o 062 de la Guardia Civil ante hallazgos de dispositivos de la Guerra Civil.
Según informa el EBYL, los términos municipales con mayor número de incidencias con artefactos de la Guerra Civil son: Sotodosos (13), Brihuega (12), Hita (12) y Las Inviernas y Muduex (11). A estos hay que añadir numerosos casos, dispersos por la geografía provincial, sobre los que ha informado Nueva Alcarria a partir de hallazgos difundidos por la Benemérita a través de las redes sociales. Son 24 adicionales, que se engloban dentro del total de intervenciones, de los que solo dos son cajas de cartuchos de dinamita y, el resto, artefactos bélicos de la contienda, a los que hay que sumar multitud de actuaciones que no han trascendido o no han sido recogidas por los medios.
Cuatro en el año 2022; dos en 2021; tres en 2020; uno en 2018; uno en 2017; cinco en 2015; tres en 2014; uno en 2013; y cinco en 2012, en Cogolludo, Luzaga, Huertahernando, Rugilla, Sotodosos, Lupiana, Escamilla, Brihuega, Copernal, Aleas, Matillas, Ledanca, Miralrío, Hita, Copernal, Castejón de Henares, Mondéjar, Setiles y Herrería, entre otras.
En su balance de actuaciones han operado en 26 ocasiones en casos que denominan “artefactos incompletos”, es decir, comenta Juan Carlos Pérez García, miembro del EBYL desde la creación desde este servicio, “les faltaba una parte esencial, puede ser que no tuviera espoleta, o que, simplemente, estuviera hueco… pero lo importante es que siempre se comprueba y se trabaja de forma minuciosa en cada uno de los casos de los que recibimos información o notificación”. En lo que concierne a las falsas alarmas ha habido 14 y, en el capítulo de “otras actuaciones”, 20 en total.
Cazadores, senderistas, agricultores o moradores de inmuebles han encontrado explosivos en el campo, en obras de casas, altillos, sótanos, graneros, restauraciones de bodegas o carreteras. “La gran mayoría de ellos en explotaciones agrarias donde antaño, en la Guerra Civil, se estableció el frente, sobre todo en épocas de labor, cuando se procede a arar y levantar los barbechos”, ilustra el técnico del EBYL.
Los obuses de artillería son los más hallados, aunque también se han desactivado granadas de mano, granadas de mortero, o minas anticarro (de forma aislada). Y, como curiosidad, se han topado igualmente con cajas de cartuchos de dinamita muy antiguas que datan de la época del desarrollo de autovías cuando se utilizaba mucho para hacer los túneles. También en trabajos de rehabilitación de casas, cuyos moradores avisan de la incidencia. Hace unos años se halló una en las obras de una carretera. En otra ocasión, una mina anticarro.
Juan Carlos Pérez García, de la misma manera que sus otros dos compañeros del EBYL, atiende las órdenes que les llegan directamente de la Jefatura de la Comandancia. Él lleva desde 2007, año en que se creó la unidad. Otros dos componentes acaban de finalizar el curso de formación que realizan en la localidad de Valdemoro que se sumarán en breve.
Todos los miembros tienen el mismo grado de preparación, por lo que “cualquiera puede realizar cualquier función que se le encomiende”, especifica. “Todos tenemos los mismos conocimientos, hacemos los mismos cursos y actualizaciones”.
Su tarea tiene dos vertientes. En el caso de que haya un requerimiento ciudadano, a través del teléfono del Servicio de Emergencias de Castilla-La Mancha 112 o el 062 de la Guardia Civil ellos son los primeros en acudir, los que realizan la primera valoración. “Vemos la naturaleza del explosivo, si está activo, o está inerte, la peligrosidad… se adoptan las primeras medidas de seguridad y, si consideramos que el artefacto está completo, es decir, tiene su carga explosiva intacta, y hay que desactivarlo, o llevar una detonación controlada, es cuando pasamos aviso al servicio de desactivación (SEDEX) para que acudan y procedan”, asegura el técnico del EBYL.
Otra de sus funciones encomendadas es la relativa a los servicios preventivos, “relativos a puntos vulnerables, presas, sistemas de tendido eléctrico, estaciones de bombeo de agua; sobre cualquier punto sensible logísticamente realizamos revisiones periódicas”, ilustra Pérez García.
¿Y si localizo un explosivo?
“Lo más importante es no manipularlos. Eso sobre todo”, remarca. “Cualquier cosa sobre la que se tenga sospecha de que sea un artefacto, aunque esté enterrado y solo se vea una parte”, prosigue. Como mucho una fotografía. “Si está en el campo, si se pueden obtener las coordenadas del punto, se obtienen. Si es en una casa, se cierra la habitación a cal y canto. Inmediatamente distancia de seguridad y aviso al 112 o 062”. Eso es lo preceptivo, hasta la llegada, desde Valdemoro, de los miembros del Servicio de Desactivación de Explosivos (Sedex). Ellos serán los encargados de realizar una explosión controlada en el sitio más seguro posible.
Los hallazgos más destacados:
DICIEMBRE DE 2022. Encuentran una granada de la Guerra Civil en Luzaga.
SEPTIEMBRE DE 2022. Hallan siete proyectiles y cuatro granadas de la Guerra Civil en 10 años en Cogolludo
MAYO DE 2022: La Guardia Civil explosiona en Huertahernando el segundo artefacto hallado en menos de un año.
OCTUBRE DE 2022. Explosionan varios cartuchos de dinamita en Ruguilla.
AGOSTO DE 2021. Miembros del Sedex de Valdemoro cercan tres casas de Huertahernando para explosionar un proyectil de la Guerra Civil.
FEBRERO DE 2021. Sedex desactiva una granada de mortero de la Guerra Civil en Sotodosos.
NOVIEMBRE DE 2020. Localizan una bomba de la aviación nazi en Lupiana.
JULIO DE 2020. Encuentran 23 cartuchos de dinamita durante la limpieza de un corral en Escamilla.
ENERO DE 2020. Un cazador encuentra un proyectil de la Guerra Civil en el monte de Yela, en Brihuega.
MAYO DE 2018. La Guardia Civil desactiva tres granadas de mortero de la Guerra Civil en Copernal.
ABRIL DE 2017. La Guardia Civil desactiva un proyectil de artillería originario de la Guerra Civil en el término municipal de Aleas.
SEPTIEMBRE DE 2015. Desactivan un proyectil de artillería de la Guerra Civil en Matillas.
OCTUBRE DE 2015. Desactivado un proyectil de la Guerra Civil en Ledanca.
JUNIO DE 2015. Desactivado un proyectil de la Guerra Civil en Villaviciosa de Tajuña.
JULIO 2015. Desactivado un proyectil de artillería y dos granadas de mortero de la guerra en Miralrío.
FEBRERO DE 2015. La Guardia Civil desactiva un proyectil de la Guerra Civil en Hita.
JULIO DE 2014. La Guardia Civil desactiva una granada de mortero en Copernal.
MARZO DE 2014. La Guardia Civil desactiva cuatro proyectiles de la Guerra Civil en Humanes.
OCTUBRE DE 2013. Desactivado un proyectil de la Guerra Civil en Castejón de Henares.
NOVIEMBRE DE 2012. Desactivada una granada de mano de la Guerra Civil en Mondéjar.
OCTUBRE DE 2012: Desactivado un proyectil de la Guerra Civil en Sigüenza.
SEPTIEMBRE DE 2012. La Guardia Civil desactiva un proyectil de la Guerra Civil en Miralrío.
MAYO DE 2012. Desactivadas tres granadas de la Guerra Civil en Setiles y Herrería.