Luzaga, primer pueblo de la comarca de Molina en tener cámaras de videovigilancia

Diciembre de 2018, más de 1.500 personas se reúnen en Alcolea, una localidad situada justo a las puertas del mayor desierto demográfico de Europa: la comarca de Molina. La protesta había sido convocada para denunciar la inseguridad que había en la zona. En unos meses, los municipios del entorno habían registrado más de medio centenar de robos. La población pedía soluciones y la Guardia Civil se comprometió a buscar soluciones y a colaborar con los ayuntamientos.

Casi un año después, la situación ha cambiado radicalmente. Las respuestas llegaron en forma de detenciones, cuando la Guardia Civil desarticuló la banda que había cometido, al menos, 111 robos principalmente en localidades de la Sierra Ministra y Sierra Norte- “Una de las razones que han hecho cesar los robos ha sido el aumento de efectivos de la Guardia Civil”, asegura el alcalde de Luzaga, José Luis Ros. “En el cuartel de Torremocha han pasado de un agente a ocho”. “Le doy muchísimo las gracias a la Guardia Civil y al Subdelegado del Gobierno”.

Y a ese aumento de efectivos viene a sumarse ahora una nueva iniciativa, la instalación de cámaras de seguridad. Luzaga será el primer municipio de la comarca de Molina que cuente con este tipo de tecnología. “Solicitamos colocar en el pueblo una serie de cámaras de videovigilancia como elemento de prevención, para evitar la intranquilidad que existía en la zona por los robos”, recuerda Ros. Luzaga sigue así el camino que comenzó Galápagos el pasado verano, cuando se supo que sería la primera localidad de la provincia en tener este tipo de tecnología. “Los vecinos y mayores están más tranquilos porque están más protegidos por los agentes sobre el terreno y en breve por las últimas tecnologías”

Y lo más probable es que Luzaga tampoco sea la última localidad en tenerlas, ya que en estos momentos hay otros 12 ayuntamientos y dos urbanizaciones de toda la provincia que se han dirigido a la Subdelegación del Gobierno interesándose por la instalación de videocámara.

Una de las objeciones que se ha puesto tradicionalmente al uso de cámaras de vigilancia es su relación con el derecho a la intimidad de las personas a las que graban. Sin embargo, Ros calma este temor asegurando que “respetan el derecho a la intimidad y a los datos personales”. Una vez colocadas, el material grabado será almacenado en un servidor situado en una caja fuerte del Ayuntamiento y conectada con la Guardia Civil. “Las imágenes solo pueden ser visionadas por la Guardia Civil en caso de que haya un problema”, explica.

Inversión en seguridad

El sistema diseñado para Luzaga permitirá tener controlados los accesos a la localidad con tres cámaras. “Eso es importante de cara al presupuesto porque se puede utilizar una tecnología muy avanzada y que funciona durante las 24 horas del día” con una inversión cercana a los 12.000 euros, IVA incluido. Un presupuesto a tener en cuenta para un Ayuntamiento del tamaño del de Luzaga. “Estaría bien que el Leader pudiera dar una ayuda para instalar estas cámaras, que ayudan a dar más seguridad”. Quien sí ha ayudado económicamente a mejorar la seguridad es la Diputación provincial, que ha instalado unas bandas de prevención de velocidad a la entrada de los municipios, lo que hará que los coches pasen más despacio.

El Ayuntamiento ha tenido que realizar varias gestiones antes de recibir la aprobación para instalar estas cámaras. “La solicitud se presenta con el proyecto en el que se indica la tecnología de las cámaras y donde se instalarán”. Luego la Guardia Civil presenta un informe que también cuenta con la firma del Subdelegado.

Ros se muestra satisfecho por una medida que servirá para dar más tranquilidad a la localidad, pero que no considera definitiva. “Ayuda, pero tampoco es que sea la solución. La videocámara no evita el robo, pero es un elemento de prevención importante”.