
Marchamalo concluye unas fiestas llenas de devoción y alegría
Las Fiestas Patronales de Marchamalo volvieron a ser un espacio de encuentro entre vecinos y visitantes de poblaciones cercanas, como Guadalajara, que ya van abriendo boca de cara a las fiestas estivales. Uno de los eventos centrales fue la XX Paella Popular, en la que se despacharon 2.000 raciones. Este multitudinario evento se completó con actividades para niños y un ambiente festivo que duró hasta la madrugada.
La Cubierta del Parque de Ferias se llenó de gente también para los bailes públicos, como el de la orquesta Entre Musas, y para citas como el EstoFest o el Vermut Flamenco. A pesar de la lluvia que causó algunos inconvenientes el viernes, los días posteriores mantuvieron el pulso festivo en la localidad. El ambiente no decayó gracias a una participación vecinal constante y a la buena acogida de las actividades programadas.
Atrás queda el pregón, ofrecido por la subdelegada del Gobierno, Susana Cabellos, que emocionó especialmente al público, muchos de ellos antiguos alumnos suyos del IES ‘Alejo Vera’. En su discurso, expresó su gratitud y recordó sus años como docente, lo que generó una conexión especial con los asistentes y marcó el inicio oficial de las celebraciones.
El Desfile de Carrozas y Comparsas reunía numeroso público y fue uno de los actos más vistosos de las fiestas. Contó con una participación más alta que en años anteriores y con un despliegue de colorido, originalidad y entusiasmo que llenó las calles de alegría y aplausos.
El programa incluyó también la XXIII Fiesta del Atletismo, la tradicional Diana y pasacalles, la Misa de Difuntos, y numerosas actividades infantiles celebradas en el Complejo Deportivo ‘Llanos Manrique’. Estos actos permitieron combinar el deporte, la devoción, la música y el juego en una propuesta diversa y para todas las edades.
La implicación de peñas y asociaciones locales fue fundamental para el éxito de las fiestas, desde los carretones infantiles hasta los concursos de carretillas. Las peñas se volcaron también en actividades de animación, talleres y reparto de comida, reforzando el carácter abierto y participativo de la celebración.
Las festividades reflejaron una vez más la cultura, las tradiciones y el espíritu comunitario de Marchamalo. La combinación de emotividad, gastronomía, música y colaboración vecinal consolidó unos festejos vividos con intensidad y que dejaron un recuerdo compartido entre todos los asistentes.