Page buscará "una mayoría sólida y autónoma" y puntos de encuentro con otros partidos salvo con Vox: "Por supuesto, no"

10/01/2019 - 15:15 E.PRESS

El presidente regional señala que nuestra comunidad autónoma es muy distinta a la andaluza.

El presidente de Castilla-La Mancha y líder del PSOE en la región, Emiliano García-Page, quiere buscar "una mayoría sólida y autónoma" de cara a los próximos comicios autonómicos, así como "puntos de encuentros con quienes se quieran entender dentro del marco constitucional y el Estatuto de Autonomía", aunque ha aclarado que ello no ocurrirá con Vox. "Con Vox, por supuesto, no".

Preguntado por si en la región podría ocurrir en las elecciones algo similar a lo acontecido en Andalucía, durante una rueda de prensa con más de 50 medios de la Comunidad Autónoma, se ha mostrado convencido de que "hay muchas diferencias" con esa región, aunque es consciente de que "el riesgo no lo tenemos evitado ni está conjurado". "Evidentemente, puede pasar", ha apostillado.

"Durante años he pensado que el único riesgo para la unidad de España eran los independentismos, también hay riesgo en la unidad y la cohesión si volvemos a las dos españas", ha reflexionado, remarcando que su compromiso político va a ser el de defender la España constitucional, positiva, plural, la igualdad y "luchar lo más posible para impedir que exista una dicotomía en dos bloques", considerando "esencial" que haya clase política que trabaje por evitar el sectarismo.

Volviendo a su objetivo electoral, ha comentado que se va a plantear "un ejercicio proactivo para evitar la dicotomía", buscar "siempre" puntos de acuerdo y "una confianza que me dé seguridad". "Yo corro más sin muletas", ha avisado.

Así, va a pedir el voto para poder "completar" su proyecto iniciado en 2015 tras desbancar al PP del Palacio de Fuensalida, con la intención de continuar con "la línea recta" que a su juicio instauró su Ejecutivo en un contexto de "incertidumbre" en el panorama político nacional.

SEGUNDA PARTE DEL PARTIDO

En esta rueda de prensa con más de 100 periodistas acreditados en la que ha querido hacer balance de su mandato, ha insistido en que su objetivo de "recuperar lo perdido" entre 2011 y 2015 no está completado, ya que aún le resta una legislatura para conseguirlo en lo que será su "segunda parte del partido".

Es por esta razón por la que ha decidido optar a la reelección, poniendo por delante "los intereses de la Comunidad Autónoma" de "las luchas internas" del PSOE a nivel nacional.

"Creo que hemos conseguido el reto de mantener el rumbo a pesar del cambio de contexto en España y de altibajos de todo tipo. Casi podría decir que la línea recta que hemos marcado desde el primer día la podemos seguir punto por punto", ha indicado.

Ha celebrado que sigue siendo "el mismo presidente" que asumía el mando en 2015, ya que no ha tenido que retractarse "de ninguno" de sus objetivos para sacar adelante su programa político.

Incluso, ha incidido, ahora puede hacer un planteamiento político mucho más transversal" que al inicio de legislatura. Aunque "no está claro cuándo habrá presupuestos ni cuándo habrá elecciones" en "un país de tiovivo", ha comprometido implementar a futuro políticas "para seguir dando la vuelta" a la etapa Cospedal y para "posicionar a Castilla-La Mancha en una dinámica de aprovechamiento del crecimiento económico por encima de la media nacional".

Esto será posible, según ha dicho, porque la región "está aprovechando la dirección de los vientos favorables de la economía" tras "recomponer las piezas del puzle".

DE LA "PREVISIBILIDAD" A LA "MONTAÑA RUSA"

García-Page ha arrancado su discurso remarcando que el periodo democrático de los últimos 40 años en España venían caracterizados por "una cierta previsibilidad" y un contexto "relativamente estable", algo que en los últimos tiempos ha virado en "una auténtica montaña rusa" en la política, tanto regional como nacional.

Ante este escenario, ha presumido de haber mantenido su "proyecto" y su "actitud" de una forma "constante" pese a la coyuntura política en un mandato marcado por el "apuñalamiento" de Podemos en la tramitación de los presupuestos de 2017 y que provocó dar cabida a dos miembros de la formación morada en el Ejecutivo.

En su opinión, su Gobierno ha sacado adelante "el grueso" de su proyecto de legislatura "desde una posición muy central", dentro de su objetivo de conseguir que estos cuatro años dejaran ver a la opinión pública "la otra cara de la moneda" en comparación con las políticas de su antecesora, María Dolores de Cospedal.

Ha defendido su "eje conductor" de legislatura apoyado en políticas sociales y desarrollado "sobre criterios de consenso y con una enorme complicidad con la mayoría del tejido social de la región", tanto con agentes sociales como empresarios, sindicatos y el movimiento asociativo.

"SE CAYÓ EL MITO DE LA SOSTENIBILIDAD"

Para García-Page, hay que seguir apostando por el Estado del Bienestar para que no retroceda, toda vez que "ya se ha caído el mito" de su sostenibilidad.

Otro mito caído según el dirigente autonómico ha sido el de que los derechos sociales adquiridos no podían retroceder, algo que en su opinión sí ocurrió con los gobiernos 'populares' en España y en Castilla-La Mancha, "como les pasó a los funcionarios que creyeron que nunca podrían ser despedidos".

Otro reto ahora es "recuperarse de la incertidumbre" alrededor de los servicios básicos esenciales que tiene que prestar una administración. "Si algo ha quedado claro estos años es que, si de algo podemos presumir, es de haber puesto en circulación con normalidad la rueda de las instituciones, de la economía y del trabajo de común acuerdo entre un Gobierno que tira con el conjunto de la sociedad", ha aseverado.

OPTIMISMO TRAS LAS ENCUESTAS

Ha tenido también palabras para referirse a la última encuesta publicada esta misma semana --encargada por su propio partido-- y que le colocan al borde de la mayoría absoluta, vaticinio ante el que se ha sentido "agradecido".

"El roce hace el cariño, pero el cariño no se traduce en votos, como hemos visto en Andalucía", ha dicho, rechazando hacer una "lectura triunfal" de los augurios de un sondeo que hundía al PP distanciándolo a 14 puntos del PSOE.

Emiliano García-Page no ha cerrado la puerta a "ningún apoyo social" que pueda sumarse a un proyecto que "va por buen camino" pero que tiene que "culminar".

Lo que dicen las encuestas, a su juicio, "es que la gente sabe bien quién ha tirado del carro, quién se ha subido al carro y quién le ha puesto ruedas al carro". Con todo, ha llamado a la "confianza general" de la opinión pública para seguir apostando por su proyecto.

SANIDAD, ECONOMÍA Y SERVICIOS SOCIALES

En materia sanitaria, ha vaticinado que si sigue gobernando el PSOE en la región la próxima legislatura va a ser "tremendamente buena" para las grandes infraestructuras sanitarias proyectadas en la Comunidad Autónoma, como son los hospitales de Guadalajara, Toledo, Albacete, Cuenca o Puertollano.

Al analizar la evolución económica en la región, ha señalado que se han batido marcas en materia de exportaciones, de creación de empleo o de implantación de empresas.

"Vamos como una moto en muchos aspectos. Y esto, junto al crecimiento récord en materia turística, hacen de Castilla-La Mancha una región que aprovecha sus posibilidades", ha considerado el presidente regional, que además ha sacado pecho por el incentivo a las energías renovables en la región.

En materia de agua, ha puesto el acento en la "defensa" que Castilla-La Mancha ejerce sobre sus recursos hídricos; y ha puesto en valor que su Ejecutivo ha conseguido una "reprogramación" de fondos europeos para contrarrestar una pérdida de 400 millones de euros por "inacción" de gobiernos 'populares'.