PROSEGUIRÁ EL DESCENSO DE ÓMICRON: Así lo refleja la depuradora de Guadalajara

28/01/2022 - 16:54 PACO CAMPOS

Estas cifras, que se reflejan con un lapso de 10 días después en las estadísticas oficiales, apuntan hacia un descenso progresivo de los niveles de contagio en las sucesivas cifras que ofrezca Sanidad.

Unos datos que tienen una gran fiabilidad, ya que, entre otros factores, las aguas residuales no están mezcladas con agua y barro procedente de la lluvia, debido a la carencia de ésta durante las dos últimas semanas, lo que hace que tengan una alta fiabilidad en cuanto al pronóstico.  

Según el documento denominado “control microbiológico en aguas residuales como indicador epidemiológico de alerta temprana de propagación de covid-19”,  publicado por el Ministerio de Transición Ecológica, durante la semana 78 (16 a 22 de enero de 2022) se ha detectado la primera disminución en la sexta ola en la EDAR de Guadalajara, 0,95 log10 cg/l, respecto a la semana anterior. Sólo se ha descubierto la variante Ómicron.

La epidemiología en aguas residuales es una técnica que busca conocer la presencia y circulación del SARS-CoV-2 en una comunidad, a partir del material genético del virus que se detecta en las aguas residuales. “A partir de esos niveles detectados y su variación a lo largo del tiempo podemos evidenciar la circulación del virus dentro de la comunidad”, reza el documento. Esto es posible porque un porcentaje elevado de personas infectadas, ya sean sintomáticas, asintomáticas, presintomáticas o postsintomáticas, o incluso sintomáticas sin diagnosticar, excreta en sus heces partículas víricas que se vierten a la red de saneamiento.

Dentro de esta red de saneamiento se establecen puntos de muestreo, que pueden situarse en diferentes localizaciones hasta la entrada de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), donde se recogen muestras de estas aguas residuales.

 

Este análisis permite, por un lado, descubrir si el virus está en una comunidad en función de la presencia o ausencia del mismo en la red de saneamiento. De esta manera, una vez los niveles analizados superen el límite de detección de la técnica, se podrá determinar que, como mínimo, hay personas infectadas en la comunidad que están excretando virus en las heces. “Esta aplicación resulta fundamental cuando el virus llega a la comunidad, para anticiparse al inicio de una posible epidemia”, se indica en el documento.

 

Por otro lado, en una fase más avanzada de la posible epidemia, “este sistema permite conocer si el número de personas infectadas aumentan o disminuyen”. Por tanto, saber cómo se está propagando el virus en la población, en función de la evolución de los niveles detectados.