Salen a licitación las obras para la rehabilitación del Alcázar Real de Guadalajara
El Ayuntamiento de Guadalajara ha sacado a licitación las obras para la rehabilitación del Alcázar Real. En concreto, y tras el acuerdo unánime alcanzado en la Junta de Gobierno Local hace unas semanas, el objetivo inicial es consolidar el muro que da al barranco del Alamín pues, según informes técnicos, es el que conserva los forros de piedra originales. El valor estimado del contrato de estas obras asciende a un millón de euros (sin incluir el IVA) y el plazo de ejecución de los trabajos sería de unos doce meses.
En la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Guadalajara celebrada el pasado 10 de septiembre, entre otros asuntos, se acordó por unanimidad de los miembros asistentes aprobar el expediente de contratación para “ejecución de las obras incluidas en el proyecto de restauración de la muralla y los muros del Alcázar Real de Guadalajara, fase 1, mediante procedimiento abierto, tramitación ordinaria y múltiples criterios de selección”. En el expediente de contratación para la ejecución de estas obras, también se indica que “el valor estimado del contrato es de 1.023.794,20 euros, sin incluir el IVA”.
Para el equipo de Gobierno, este proyecto es una prioridad y, una vez se lleve a cabo la rehabilitación, será sin duda un elemento fundamental en la dinamización del casco histórico de Guadalajara. Así, desde el Consistorio no se descarta que, una vez que vuelva a ser un espacio visitable, el Alcázar pueda convertirse en un lugar privilegiado donde puedan llevarse a cabo la celebración de eventos culturales, desde visitas teatralizadas para conocer mejor su glorioso y extenso pasado hasta otro tipo de iniciativas más ambiciosas.
De hecho, ya en el mes de marzo, el alcalde de Guadalajara, Alberto Rojo (entonces todavía candidato del PSOE a la Alcaldía), expresó su compromiso de “revitalizar el centro histórico de Guadalajara” cuando fuese alcalde y recuperar el patrimonio emblemático de la ciudad “por el que no se ha preocupado Antonio Román en sus doce años al frente de la Alcaldía”.
Bien de Interés Cultural
El Alcázar Real de Guadalajara, declarado Bien de Interés Cultural en 1949, fue construido entre los siglos VIII y X y es de titularidad pública. Desde su origen, ocupa un espacio en la entrada oeste de Guadalajara y separa el barrio artesano de la Alcallería o de Cacharrerías del resto de la ciudad. En febrero de este año, fue incluido en la Lista Roja del Patrimonio de la asociación Hispania Nostra “por su estado de total abandono y de ruina”.