San Isidro simboliza el regreso de la “vida y la convivencia”
Los presentes en la Misa Mayor y bendición de los campos muestran su ilusión por la celebración del día del labrador dentro de una normalidad en la que no hay que olvidar a los fallecidos por el Covid. (FOTOS: PACO CAMPOS)
El ex alcalde de Azuqueca entre 2007 y 2015, y presidente de las Cortes de Castilla-la Mancha vivió de primera mano, como azudense, junto a su sucesor y actual primer edil, José Luis Blanco, miembros de la Corporación municipal; la vicepresidenta segunda de las Cortes de CLM, Ana Guarinos; el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero; la de Bienestar Social, Bárbara García Torijano; así como parlamentarios nacionales por Guadalajara, miembros de la Hermandad de Agricultores, de la Cofradía de la Virgen de la Soledad y feligreses a título individual, lo que supone asistir a la Misa Mayor en Honor a San Isidro Labrador una vez superado lo más difícil de la pandemia.
A juicio de Blanco, estas celebraciones son fruto de “una ciudad orgullosa de su pasado, satisfecha con su presente y que mira con ambición el futuro; solidaria y comprometida y con una voluntad clara de construir una sociedad más justa y cohesionada y del alcanzar cotas más altas aún de bienestar económico y social”.
Belido siente “una gran emoción, porque estamos celebrando el reencuentro, estamos celebrando la vida, la convivencia, y me encanta ver Azuqueca con vitalidad, todo este fin de semana llena de gente, vecinos y vecinas de Azuqueca y todo aquel que ha venido a acompañarnos, por tanto, estoy emocionado, satisfecho y agradecido, siempre con un profundo recuerdo a las personas que durante estos dos años, por diferentes causas, el Covid y otras más nos han dejado”, recalcaba Pablo Bellido.
La tradicional bendición de campos, acompañada por la Banda de Música de Azuqueca de Henares, puso colofón al acto religioso más emblemático.