Un día que Guadalajara fue capital simbólica de Castilla-La Mancha: El 31 de mayo de 1985

02/06/2019 - 12:23 Eduardo Díaz

El Rincón de Edu nos recuerda lo que aconteció aquel día en nuestra ciudad. 

El viernes celebramos la festividad de Castilla- La Mancha, una región a la que pertenece Guadalajara desde el año 1981 y que tras el paso de varios años se ha sabido que fue una decisión negociada en Madrid a tres bandas entre: Alfonso Guerra, Pérez Llorca y Joaquín Leguina. En el rincón de esta semana vamos a recordar ese día histórico que supuso para Guadalajara la celebración del día de la región, el 31 de mayo del año 1985. La víspera de ese día trajo consigo numerosas inauguraciones de instalaciones en Guadalajara, que fueron presididas por el presidente de la Junta de aquella época, José Bono, y el alcalde de la ciudad, Javier de Irizar. La jornada vespertina comenzó con la inauguración de la peatonalización de la Plaza Mayor, que supuso un cambio radical en la fisonomía de la Casa Consistorial. Posteriormente se abrieron al público las instalaciones del Mini-Zoo, con una gran expectación sobre todo por parte de los más pequeños de la ciudad. Mas tarde las autoridades se dirigieron al parque de la Amistad donde inauguraron varios servicios complementarios que aderezaban la zona verde y por ultimo inauguraron el parque de la Fuente de la Niña, en unos terrenos que habían sido cedidos al Ayuntamiento por parte del Ministerio de Defensa.

El día grande de la región comenzó con la celebración de un encierro de toros, que por primera vez, y sin que sirviera de precedente, se celebró a las diez de la mañana, con la intención de que los visitantes de otras ciudades de la región llegasen a tiempo para estar presentes en el acto taurino. Fueron muchísimos los vecinos de la región que observaron la carrera matutina de las reses bravas y quedaron impresionados con el ambiente festivo que registraban las gradas del Coso de las Cruces. Esa mañana muchas personas de la región conocieron que en Guadalajara se corrían toros de lidia por las calles del centro de la ciudad como ocurre en Pamplona.

Al mediodía se celebró una Milla Urbana en el paseo de las Cruces, en la que intervino el atleta Colomán Trabado, que ese mismo año había obtenido la medalla de oro en los campeonatos del mundo de atletismo en Paris. De manera sorpresiva fue vencido por el velocista madrileño Andrés Vera. Uno de los platos fuertes del día llegó con la comida de hermandad que se celebró en la explanada del recinto ferial de Adoratrices, lugar en donde se repartieron más de cinco mil raciones de comida y que contó con la presencia del vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra

Por la tarde se celebró un festival taurino en la Plaza de Toros y ahí llegó la polémica; muchas de las personas que habían llegado a nuestra capital en autobuses fueron informados a la salida de sus localidades de origen de que todos los actos eran gratuitos y con esa intención llegaron al coso taurino. Allí comprobaron que para acceder al interior de la plaza tenían que sacar entrada e incluso solo quedaban disponibles algunas de las más caras en la barrera de sombra. Ello provocó el enfado y malestar de muchos que se sintieron engañados. El festival tuvo un éxito rotundo y un lleno hasta la bandera, actuando el rejoneador Rafael Peralta y los diestros Dámaso González, El Soro, Espartaco, El Yiyo y por ultimo el novillero Manuel de Paz. Por cierto, el matador de toros José Cubero “ Yiyo”, fue la ultima vez que pisó el albero de la plaza de Guadalajara, ya que meses más tarde resultó cogido de manera mortal en la plaza madrileña de Colmenar Viejo.

Un concierto en el campo de fútbol de la Fuente de la Niña, con más de veinte mil personas asistentes, puso el fin a este histórico día. Actuaron cantantes de la talla de Joaquín Sabina, José Luis Perales y la banda de “ Alaska y Dinarama”.