Un joven emprende la primera quesería artesana en Centenera con el impulso de Fadeta
Fabrica, vende y ahora quiere diversificar el negocio y tener su propia cabaña ganadera.
La curiosidad por el mundo ganadero en su infancia hizo que Efrén Bosch Gómez llegara a su juventud con la intención de profesionalizarse. “Con 17 años me fui a la Escuela de Pastores del Pais Vasco, en Aranzazu a estudiar un curso de ovino lechero y derivados lácteos, y después vinieron más clases, más aprendizaje, hasta que por fin conseguí la financiación para emprender mi propio negocio”. Desde 2012 hasta 2022 el camino no ha sido fácil pero Efrén ya tiene su quesería, en el pueblo de su madre, Centenera. “Compre una vivienda familiar en el pueblo y en el garaje monté la quesería”, cuenta este emprendedor.
La idea es seguir creciendo, ahora con su propio ganado para sacar la leche que compraba a productores locales para elaborar sus quesos, cien por cien naturales, controlando todo el proceso y trabajando con gente de la tierra. “Adquirimos leche de vaca y cabra del entorno, pasteurizada o cruda, con cuajos naturales, fermentos lácticos y sal. El cliente adquiere un producto de primera calidad”, subraya Efrén, que nos cuenta los tipos de quesos que salen de El Recuerdo de Centenera. “Hacemos queso joven semiduro y maduro de vaca; queso joven semimaduro de cabra y, los fines de semana hacemos queso fresco. La idea es comenzar una producción de yogur el mes que viene”.
En la actualidad están haciendo unos 1.500 litros de leche a la semana. “La idea es seguir en esta línea y aumentar hasta los dos mil”.
El buen hacer de este quesero hace que sus productos lleguen a todos los rincones de la provincia. El boca a boca está siendo su mejor promoción y son muchos los que se acercan a su fábrica-tienda para adquirir sus quesos. “Aprovechando el kit digital, vamos a poner en marcha la página web y canalizar los envíos a domicilio que ya hacemos, además de poder llegar a más gente”. El entusiasmo de este emprendedor se palpa en la ilusión con la que habla de su negocio, que fue su sueño de niño. “Lo más difícil fue conseguir la financiación, pero por fin, en junio de 2022, abrimos. He contado con la colaboración familiar, con fondos propios y también la ayuda de Fadeta para poder empezar a funcionar”, relata este quesero alcarreño.
La inversión total fue de más de 90.000 euros, de ellos, 43.000 fueron para maquinaria de refrigeración, recibiendo, en este sentido, una subvención de unos 16.200 euros para afrontarla. “Con el dinero de Fadeta adquirimos las cámaras frigoríficas para la conservación del producto y la elaboración de los proyectos. Contar con ellos ha sido de gran ayuda”, explica.
Para emprender su negocio, contó con la asesoría técnica de José Luis Martín Afinador, reputado consultor para pequeñas queserías artesanales y de producción ecológica; asesor y formador en productos lácteos y derivados.
La quesería artesana El Recuerdo de Centenera es un negocio innovador en la comarca y el objetivo, como nos ha contado Efrén, es seguir creciendo y generar actividad económica en el municipio, pudiendo llegar a crear más puestos de trabajo.
La quesería tiene las puertas abiertas a todo el mundo, podrás ver, bajo reserva de visita guiada, desde dentro, la sala de elaboración, así como la cava de afinado, donde maduran nuestros quesos sobre tablas de madera natural, obteniendo así unas calidades organolépticas inigualables.