Una delegación europea visita los campos de lavanda de Brihuega
Este evento se ha organizado con la finalidad de que los representantes europeos conozcan el impacto económico que estos cultivos generan en la comarca tanto a nivel empresarial como turístico.
El delegado de la Junta en Guadalajara, José Luis Escudero, ha participado hoy en Brihuega en la visita institucional protagonizada por una delegación europea encabezada por la eurodiputada griega Maria Spyraki para conocer las propiedades y el potencial económico generado por la producción de la lavanda en particular y de las plantas aromáticas en general. Esta visita ha sido organizada por la Asociación Nacional de Cosmética y Perfumería (Stanpa).
Este grupo de trabajo está estudiando, en el seno de la Comisión Europea, que los aceites esenciales generados de la lavanda, lavandín y otras plantas aromáticas queden exentas de cualquier declaración de toxicidad, dentro de la nueva normativa que la Unión Europea prepara de manera global en su estrategia de sostenibilidad del llamado Pacto Verde. Y hoy, la eurodiputada Spyraki ha asegurado en Brihuega que en el próximo otoño estará listo el informe definitivo a este respecto.
Tras conocer cómo se encuentra este proceso de boca de la propia eurodiputada, José Luis Escudero asegura que “hemos quedado muy satisfechos con la visita de hoy y hay que valorar positivamente que ya se haya estudiado una moratoria de cuatro años” antes de aplicar cualquier decisión al respecto. “En el mes de octubre, que será ya bajo la presidencia española de la Unión Europea, vamos a conocer el informe definitivo, aunque confiamos en que se resuelva de una manera positiva”.
En esta visita institucional también ha estado presente el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido; el subsecretario para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Miguel González, y representantes de otras administraciones, así como miembros de los sectores implicados de agricultura, cosmética y perfumería, entre ellos Abelardo Carrillo, presidente de ANIPAM (Asociación Nacional Interprofesional de Plantas Aromáticas y Medicinales).
La delegación europea ha visitado esta mañana los propios campos de lavanda de Brihuega y ha recorrido las calles del municipio, concluyendo con un acto en las zonas estanciales situadas junto a la iglesia de San Simón. La localidad briocense celebra precisamente en estos días, coincidiendo con el momento de mayor esplendor cromático de este cultivo, el Festival de la Lavanda, que presenta un notable programa de actividades de diferente índole.
A la espera de ese informe definitivo que llegará en unos meses, Escudero ha querido destacar que “hemos trabajado intensamente en la anterior legislatura” en torno a este asunto. “El Gobierno de Castilla-La Mancha y su presidente han estado defendiendo a los productores de estas plantas aromáticas, y lo han hecho junto al Gobierno de Pedro Sánchez, con su ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, a la cabeza”, ha recordado.
Las propias Cortes de Castilla-La Mancha aprobaron el pasado mes de marzo una declaración institucional en la que se situaba la lavandicultura como “un sector estratégico en crecimiento y sostenible en Castilla-La Mancha, reivindicando “su enorme potencial, como producto natural cuyas propiedades beneficiosas han sido demostradas durante siglos”.
3.000 hectáreas de plantas aromáticas en Guadalajara
A lo largo de esta semana, según ha querido recordar Escudero, “el presidente Emiliano García-Page se manifestaba apoyando a los agricultores de este sector, que son muy importantes en Castilla-La Mancha y de los que Guadalajara es, además, su máximo exponente, ya que casi 3.000 hectáreas de plantas aromáticas se cultivan en nuestra provincia”, según los datos del ejercicio 2022.
El delegado de la Junta ha querido abundar en el hecho de que “tanto la lavanda como el lavandín o el espliego y, en definitiva, las plantas aromáticas generan desarrollo y en su producción solo operan factores naturales, generando industria”, como las cinco destilerías que se ubican en la provincia de Guadalajara.
Además, “es un cultivo que crea cultura, porque tanto Brihuega como otros municipios de la comarca están recibiendo visitantes de una manera permanente, generando importantes ingresos en una apuesta por el turismo sostenible”, recuerda Escudero.