UCRANIANOS Y ALCARREÑOS JUNTOS: Las caras solidarias de una tragedia

Por el momento el resto de sus familiares, residentes en un punto cercano a la frontera con Rumanía, "están bien, tienen cubiertas las necesidades básicas, me acaba de decir mi abuela, aunque está siendo muy muy duro, porque en cualquier momento les pueden bombardear", señala Diana en perfecto castellano, con lágrimas contenidas a punto de caer. "Si pudiera también iría a la guerra", se lamenta, y prosigue a duras penas: "Yo no creía que en pleno siglo XXI pudiera producirse semejante guerra", expresó con el deseo de que "acabe pronto".  

Diana Liakhomska tiene 23 años, trabaja en logística y llegó a Guadalajara con tan solo seis.

En estos momentos está llegando una gran cantidad de víveres y de prendas de vestir al local sito en la calle Hospital 4, antigua Maderas Abad, que ellas, junto a su prima, apoyadas por gente de su país y muchísimos vecinos de la capital, están recogiendo. Los propietarios de Maderas Abad viven de Condemios Arriba, "su pueblo adoptivo", considera Diana, donde residen sus padres y donde vivió ella en los primeros 13 años de su estancia en la provincia.  "En cuanto vieron que estaba buscando ayuda, me cedieron el local sin ningún problema". Ahora está llegando de la capital y otros puntos de la provincia, muchos en monovolúmenes repletos de todo tipo de ayuda. Están desbordadas.

En principio seguirán su labor de 20.30 a 22.30 horas de esta tarde. Si hay más voluntarios ampliarán el horario, siempre en horario vespertino. "Había muchos vecinos que querían ayudar, pero no sabían donde, porque en Guadalajara no había ningún punto de recogida", y, por ello, decidieron impusar la iniciativa: "Cualquier ayuda nos viene bien":  Sin embargo, claman al cielo: "Necesitamos urgentemente medicinas para enviárselas a los niños, los soldados y la población en general, que en su mayoría están experimentando las penurias de la invasión rusa".

Ante la pregunta de uno de los donantes sobre cómo se va a canalizar esta cantidad de apoyo solidario, responden: "Lo que en estos momentos estamos recolectando irá destinado a un centro logístico en Alcalá de Henares, desde donde se hará llegar toda esta mercancía, que será transportada desde la frontera polaca por otros voluntarios que la distribuirán a lo largo y ancho de Ucrania, así como a nuestros compatriotas que están en el área fronteriza que separa Ucrania de Polonia y que han tenido que huir". 

Yana está organizando los medicamentos, vendas, tiritas, separando la ropa por tipología, tallas y sexos, así como medicamentos para quién más lo necesita. Sin embargo insiste: "Necesitamos medicamentos porque han traído muchísima ropa y comida, que es bastante difícil de conseguir". Considera que es "alucinante" la cantidad de gente que estaba llegando al local, algo que no se esperaban. Se muestra contenta, "porque en los lugares de bombardeos hay niños recién nacidos que necesitan prendas de vestir y lo estamos logrando".

Yana Liakhomska es la encargada de la intendencia. La necesidad más urgente son las medicinas, en especial los analgésicos. 

De la misma manera, han hecho un llamamiento a las farmacias para que apoyen su iniciativa. Principalmente, dicen, "necesitamos analgésicos".

Colaboración multitudinaria

Numerosos vecinos de la capital y otros puntos de la provincia están haciendo llegar monovolúmenes repletos de todo tipo de ayudas. Ante la pregunta de uno de ellos sobre cómo se va a canalizar esta cantidad de apoyo solidario, responden: "Lo que en estos momentos estamos recolectando irá destinado a un centro logístico en Alcalá de Henares, desde donde se hará llegar toda esta mercancía, que será transportada desde la frontera polaca por otros voluntarios que la distribuirán a lo largo y ancho de Ucrania".

Entre ellos se encuentra Ana Macías, de Guadalajara. "Me mueve lo mismo que me movió cuando fue la campaña de Siria, pero Ucrania está aún más cerca te pones en su situación y, la verdad, se te ponen los pelos de punta", recalca. Con la esperanza de que pase pronto, su familia ha aportado ropa de abrigo de todas las edades.

Ana Macías, de Guadalajara, espera que termine pronto el conflicto. Ella es solidaria por naturaleza, ya que ayudó años atrás cuando el conflicto sirio. 

Marísa Sedano, y su amiga Beatriz Dominguez, vieron la noticia que públicó en exclusiva Nueva Alcarria el pasado domingo anunciando la recogida. Ellas fueron las más madrugadoras y se quedaron toda la mañana ayudando: "En estos momentos creo que es muy necesario ser solidarios, ya que si a alguno de nosotros nos ocurriese algo así nos encantaría que la población se volcase en ayudar, puesto que es muy necesario en el momento actual que reciban esas ayudas.

Marisa y Beatriz creen que es cuestión de empatía, "ya que si nos ocurriera a nosotros nos gustaría que nos apoyaran". 

En estos momentos la necesidad que tienen los soldados, aseguran, es:

- Ropa (en especial ropa de abrigo).

- Analgésicos.

- Vendas, agua oxigenada,alcohol (productos de cura).

- Todo tipo de productos en lata.

- Leche en polvo y galletas.

Para el resto de población ucraniana “que por desgracia se está quedando sin nada, en especial niños y mayores”:

- Pañales

- Ropa de todo clase de tallas

- Comida (que no sea fresca ya que no lo reciben).

Para todos aquellos que se quieran poner en contacto con Diana Lyakhomsa pueden contactar con ella a través de su perfil de Facebook, que recibe el mismo nombre. Hace un llamamiento: “Agradecería de corazón que compartierais la publicación, cuanto más apoyo tengamos mejor”.

Punto de recogida a partir del Martes 01/03

Calle hospital 4 oficina antigua maderas Abad

Horarios de recogida:

Tardes: 20:30 a 22:30