Afagu, 26 años luchando en Guadalajara para que no se olvide la enfermedad del olvido

18/10/2022 - 14:53 J.E.

Su principal objetivo ahora es trasladarse a un centro en el que puedan ayudar a más afectados.

Un año después de celebrar sus bodas de plata, la Asociación Provincial de Familiares de enfermos de Alzheimer y otras demencias de Guadalajara está en fase de crecimiento. Con Montse Garrido como nueva presidenta, la asociación está luchando por dar una mayor visibilidad a la enfermedad, por lograr un centro más grande y por ser reconocida como asociación de utilidad pública. 

“Mi madre sufrió Alzheimer, antes de morir estuvo en el centro y la trataron muy bien. Cuando hubo un cambio en la directiva la presidenta pensó en mi porque siempre he colaborado con ellos, y no me lo pensé porque se lo debía a ella”. La madre de Montse murió en la peor época del Covid-19, por lo que no se pudo despedir de ella. “Su trágica muerte hace que luche cada día por los enfermos y sus familiares, que lo pasan muy mal”.

La Asociación Provincial de Familiares de enfermos de Alzheimer y otras demencias de Guadalajara se creó en 1996. Están contentos ya que el centro sigue adelante, aunque no ha sido fácil, sobre todo en los años de la pandemia. “Estuvimos cerca de cerrar porque no había usuarios, y cuando volvimos a la normalidad, no podíamos mantener a los trabajadores, pero salimos adelante”. También fue duro para los enfermos: “Hacíamos videoterapia, pero no es lo mismo. El Alzheimer es una enfermedad de rutina, y cuando sacas a los enfermos de esa rutina sufren unos bajones importantes. La pandemia para los enfermos de Alzheimer fue mortal”. 

Sin embargo, la asociación ha cogido impulso. Hace menos de un mes, Guadalajara acogió el acto regional en el Día Internacional contra el Alzheimer. También han modernizado su logo, y están peleando por aumentar su centro. “Actualmente tenemos 20 plazas y cada vez son más los afectados que solicitan nuestros servicios, pero no podemos atenderlos, mi principal objetivo es cambiar a un centro más grande” explica Montse. “En el último año hemos recibido 5.000 llamadas, cada vez hay más gente con este tipo de enfermedades y vamos a luchar por ellas, soy consciente de que no va a ser fácil pero hay que conseguirlo porque necesitan ayuda”. 

Montse también está luchando por otro objetivo, conseguir que la Asociación Provincial de Familiares de enfermos de Alzheimer y otras demencias de Guadalajara sea reconocida como asociación de utilidad pública, “lo necesitamos para crecer” asegura. 

Actualmente en el centro trabajan una decena de personas entre auxiliares, administrativos, psicólogos, coordinadora, además de un servicio de catering ya que los usuarios comen en un centro en el que sobre todo se realiza trabajo terapéutico: “Tenemos una fisioterapeuta que viene unas horas a la semana y hace gimnasia, también hacemos manualidades con las auxiliares, y ahora hemos incluido la musicoterapia gracias a la colaboración de Nati Baldominos y Mi Voz X Tú Sonrisa. La música para un enfermo de Alzheimer es muy buena porque les ayuda a recordar, y vendrá unas horas para tener otro tipo de terapia”. 

Pero Montse no se olvida de los familiares, quienes para ella “necesitan incluso más ayuda que el enfermo”. Para ello, próximamente harán unas conferencias para cuidadores y familiares para concienciar más y ayudarles a la hora de poder llevar un familiar con esta enfermedad, más cuando no pueden estar en el centro. “El familiar sufre mucho, el Alzheimer es una enfermedad mortal, no tiene fármaco, y hay que saber llevarla. Ojalá no existiese” asegura. “Todo mi tiempo libre lo uso en investigar y ver que avances hay para ayudar a enfermos y familiares, igual me estoy obsesionando un poco, pero me gustaría que hubiera más investigación en todo esto”. El centro ha incorporado una terapia psicológica para familiares, “está hasta arriba de trabajo porque requieren mucho su servicio”. 

No es fácil asumir que se sufre Alzheimer o cualquier tipo de demencia, por ello Montse hace hincapié en la necesitad de acudir al médico si existen síntomas. “Hay muchos afectados, y otros tantos que no lo sabemos, muchos afectados no quieren que la gente sepan que ellos o sus familiares sufren la enfermedad, es un estigma”. Como anécdota, cuenta que en la I marcha contra el Alzheimer “un hombre me paró y me dijo que creía que tenía Alzheimer, que tenía algunos síntomas y que su madre sufrió la enfermedad. Estas personas tienen que ir al neurólogo y que se lo diagnostiquen, porque sino, no les podemos ayudar”. 

La asociación ofrece un servicio de ruta, gracias al cual recoge y lleva a los enfermos al centro. Para mejorarlo, quieren acondicionar una furgoneta para personas con movilidad reducida, pero necesitan dinero. Por ello han lanzado una campaña mediante la cual, cualquier persona puede realizar una donación al número de cuenta ES62 2100 5549  3321 0003 8017. También tienen un Bizum solidario para poder colaborar con ellos a través del código 05934. 

 “Queremos que sepan que estamos para luchar por ellos y sus familiares, sobre todo por aquellos que no puedan tener este tipo de terapias, porque sirve de equilibrio para su mente”.