Arranca la tramitación de declaración del tercer BIC de Brihuega

20/12/2024 - 16:07 Redacción

La iglesia de San Miguel fue cedida por la Diócesis de Sigüenza al Ayuntamiento de Brihuega por 75 años.

La Consejería de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha ha iniciado los trámites para declarar Bien de Interés Cultural en la categoría de Monumento a la Antigua Iglesia de San Miguel, cedida por la diócesis de Sigüenza al Ayuntamiento de Brihuega hasta por 75 años desde 2020

En una resolución de la Viceconsejería de Cultura y Deportes publicada por el Diario Oficial de Castilla-La Mancha en su edición de este jueves, y recogida por Europa Press, se apunta que se ha iniciado de oficio el procedimiento de los expedientes de declaración de Bienes de Interés Cultural y de su inscripción en el Catálogo del Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha, dando así inicio al expediente para la declaración de BIC y abriendo a partir de este viernes un período de información pública durante el plazo de 1 mes.

Sería el tercer BIC con el contaría el municipio, tras la Real Fábrica de Paños y la antigua iglesia de San Simón, muestra del rico patrimonio histórico de la villa y el compromiso del Ayuntamiento por su conservación y puesta en valor. Cabe destacar que, a pesar de dicho procedimiento, la iniciación del expediente supone la aplicación provisional del régimen de protección pertinente.

En ese sentido, el alcalde, Luis viejo, agradece a la Junta “el trabajo y el apoyo brindado a nuestro municipio” y señala que “es un privilegio para Brihuega contar con un espacio así, lleno de posibilidades, que recuerda nuestra historia y a su vez nos sirve para seguir escribiéndola a través de un uso cultural siempre respetuoso con su condición de monumento”. 

Por su parte, la concejal de Patrimonio, Susana Rodríguez, recuerda el compromiso del Ayuntamiento para “proteger y poner en valor todo nuestro patrimonio material e inmaterial, un tesoro que custodiamos y multiplicamos para las futuras generaciones de briocenses”.

La antigua iglesia fue cedida por el obispado al Ayuntamiento en 2020 por un plazo de cincuenta años, prorrogables otros 25 hasta los 75, y desde entonces viene siendo objeto de un plan de recuperación por fases que sigue en marcha.