Bares y terrazas recuperan la ilusión gracias al apoyo municipal

“Disfruta, come y bebe que la vida es breve”. Éste podría ser el resumen del sentir de buena parte de los hosteleros guadalajareños ante la complejidad de la situación actual que les está tocando vivir a causa de la pandemia. “Muchos clientes se han dado cuenta de que la vida sin hostelería no es lo mismo y pierde mucho encanto”, señala el vicepresidente de la Federación Provincial de Turismo y Hostelería de Guadalajara, Mario de Lucas, en alusión a las graves consecuencias derivadas del Covid que han afectado de forma especial a bares y restaurantes de toda la capital. 

Sin embargo, iniciativas como las que impulsa el Ayuntamiento de la capital como Guadalajara Vive en sus Plazas han insuflado un pequeño balón de oxígeno al sector. Durante todo el verano y hasta el próximo 18 de septiembre se seguirán llevando a cabo actuaciones musicales, de magia y humor en algunas de las plazas más emblemáticas de la ciudad, con el fin de revitalizar el tejido hostelero y empresarial y, por supuesto, alegrar la vida de los ciudadanos. 

Este ciclo ha tenido una muy buena acogida entre los ciudadanos. “Teniendo en cuenta que es la primera vez que se hace está siendo una experiencia muy positiva”, valora De Lucas añadiendo que “se está creando mucho ambiente en algunas plazas del centro”. “El hecho de poder contar con un escenario si queremos hacer algún tipo de espectáculo simplemente con notificarlo al Ayuntamiento –sino hay ninguna otra actuación previamente programada-; que facilita mucho las cosas en lo que a trámites y permisos se refiere”, destaca De Lucas. 

El vicepresidente de la Federación Provincial de Turismo y Hostelería de Guadalajara también pone de manifiesto otra de las exitosas iniciativas puestas en marcha de forma conjunta entre CEOE-Cepyme y el Ayuntamiento, como la campaña Saborear Guadalajara tiene premio con 350 cheques regalo para los clientes de los establecimientos adheridos al convenio. “Ha tenido buen resultado y buena repercusión dentro de la hostelería”, señala De Lucas, recordando a los guadalajareños que “acabamos de empezar con la 2ª etapa”. 

Entre los hosteleros, también reconocen el apoyo brindado por el Consistorio hacia el sector. “Estamos bastante agradecidos”, afirma el presidente de la Asociación de Hostelería del Centro de Guadalajara (HOSCEGU), Javier Rodríguez. “Todo lo que sea animar a la gente a que venga a los bares y restaurantes es algo positivo para nosotros”, añade Rodríguez, también propietario del Metrópolis Café Guadalajara. “Es vox pópuli; reconocemos que el Ayuntamiento nos ha echado una mano con todo, por ejemplo, nos ha proporcionado la infraestructura de los escenarios”, señala el dueño del Metrópolis Café, quien hace un llamamiento a todos los artistas que quieran actuar en alguno de los escenarios que hay habilitados por el centro a que “pregunten en los bares que están al lado”. 

Rodríguez hace hincapié en que, además del beneficio que supone para todos los comercios y establecimientos aledaños, ésta puede ser una “buena oportunidad” para todos aquellos grupos que, a causa de la pandemia, llevan mucho tiempo sin poder tocar. 

Julián González, propietario de El Perdigacho, se manifiesta en la misma línea que Rodríguez, afirmando estar “satisfechos con la respuesta de la gente” y también agradecidos al Ayuntamiento por las iniciativas. Previa autorización municipal “nosotros ya hemos hecho un par de actuaciones con djs de La Volvoreta y tenemos en mente hacer algunas cosillas más a lo largo de todo el verano”, comenta el hostelero. De esta manera, El Jardinillo, San Esteban, la Diputación o el Concejo han vuelto a recuperar, de alguna manera, la animación y el ambiente que había antes de la pandemia. A ello también ha contribuido el nuevo horario de las terrazas de la capital, tras la adaptación por parte del Ayuntamiento a la nueva normativa sanitaria, que ha permitido recuperar la esperanza e ilusión a los establecimientos.

Desde El Buen Vivir, su propietario, Daniel Camarillo, asegura que “la gente está con muchas ganas de salir” y aunque, en su caso, declara no haber notado un incremento sustancial en el número de clientes en su terraza tras la ampliación del horario sí considera que muchos de ellos se han hecho asiduos del tardeo, o que “se han acostumbrado a salir antes”.

Camarillo comenta la buena acogida que medidas como Saborear Guadalajara tiene premio está teniendo entre la clientela. “La próxima semana tenemos una reserva de un cheque que ha tocado”, reseña el propietario de El Buen Vivir. “Esto lo hace un poquito más divertido”, afirma Camarillo, quien señala lo acertado de este tipo de iniciativas enfocadas a apoyar a un sector tan damnificado por la pandemia como ha sido -y continúa siendo- la hostelería. 

La ciudadanía se vuelca con la hostelería  

Si algo coinciden en señalar una gran mayoría de hosteleros es en el apoyo recibido, a nivel general, no sólo por parte de Administración e instituciones, sino también el proveniente de otros sectores como los medios de comunicación, la ciudadanía y, mejor aún, entre los propios hosteleros. “Al final somos gente que nos conocemos todos, cuando vienen mal dadas toca arrimar el hombro”, asevera el dueño de La Volvoreta, quien opina que “si cierran todos los bares y nos quedamos dos no va a venir nadie; cuanta más oferta haya, mucho mejor”. Vicente destaca también la solidaridad de muchos dueños de los locales que “se han portado muy bien y algunos han perdonado varios meses de alquiler”. El apoyo de la clientela y la responsabilidad ciudadana también ha sido vital para no tirar la toalla durante todo este tiempo. Confían en que esto siga siendo así, ahora que la mascarilla ha dejado de ser obligatoria en espacios exteriores como pueden ser las terrazas. “La clientela suele ser muy comprensiva, no tenemos ninguna queja”, aseguran desde El Perdigacho. En la misma línea se manifiesta el presidente de HOSCEGU, aunque lamenta la ausencia de un criterio “sanitario” y no “aleatorio” como el que considera que ha regido la normativa y restricciones aplicadas a la hostelería. “Entendemos que hay cosas que, de momento, no se pueden hacer hasta que no avance la vacunación pero también necesitamos que nos dejen trabajar”, puntualiza Rodríguez.

Último caballo de batalla: el ocio nocturno

Ya va quedando menos para que las terrazas de la capital vuelvan a ser lo que eran. Ha transcurrido poco más de una semana desde que bares y restaurantes tienen permiso para mantenerlas abiertas hasta las 2:00 h los fines de semana, permiso que se alarga hasta las 03:00 h en el caso de establecimientos de ocio nocturno. “Estas horas de más nos han dado un poco más de margen”, puntualiza el dueño del Metrópolis Café. Su homólogo de La Volvoreta, comenta que, como balance del primer fin de semana con el nuevo horario, “como el tiempo no ayudaba a las terrazas, en locales cerrados se han superado todas las previsiones”. “Mucha gente vino a primera hora para coger sitio; se notaba que tenían muchas ganas de salir”, recuerda Vicente. En la misma línea se manifiestan desde El Buen Vivir, “aunque hay que ser muy cauto con toda esta situación, todo parece apuntar hacia una remontada”, apostilla su dueño, indicando que, desde la ampliación horaria y “siempre dentro del aforo permitido es un llenazo continuo”. Y es que poder estar hasta las 03:00 h el fin de semana ya se va pareciendo a “un horario normal”, reseña el presidente de HOSCEGU. “Después de cenar a la gente le gusta salir a tomarse una copa tranquilamente”, puntualiza añadiendo que “echamos en falta el interior, sobre todo, las barras; pero, poco a poco, iremos saliendo de ésta”.

Por su parte, el vicepresidente de la Federación Provincial de Turismo y Hostelería no olvida uno de los últimos caballos de batalla que quedan como es “el ocio nocturno”. De Lucas se solidariza con un sector del que sabe “lo mucho que están sufriendo”; ya que “llevan un montón de tiempo sin poder trabajar” pero se muestra confiado en que, poco a poco, el sector vaya remontando para todos. “La ampliación de horario de las terrazas son puntos que van sumando al consumo”, valora De Lucas. 

En cuanto al verano, a pesar de  la incertidumbre y del consabido bajón a causa de las vacaciones y escapadas a los pueblos hay quien incluso lo considera algo positivo. “En verano esto se vacía pero es una alegría por la vida que les da a los pueblos”, reconoce generosamente Vicente de La Volvoreta. Eso sí, todos ellos aseguran afrontar la época estival con renovado optimismo. “Los que nos quedamos intentaremos trabajar lo máximo posible”, afirman desde El Perdigacho.  Vicente mantiene el ánimo asegurando que “desde septiembre, con mayor porcentaje de población vacunada, creo que vamos a funcionar estupendamente”. Camarillo va más allá afirmando que “saldremos adelante porque es un sector que está muy enraizado en la cultura popular; está en nuestra genética y es muy resiliente a todo este tipo de circunstancias”.