Cientos de personas intentan evitar la muerte del Tajo
Centenares de personas de diferentes colectivos de Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y la Comunidad de Madrid han marchado este sábado por el centro histórico de Toledo para demandar la "urgencia" de tomar medidas efectivas que reviertan el mal estado del Tajo y del resto de ríos de su cuenca.
Amenizada por una batucada, la manifestación ha comenzado en la Plaza de Zocodover para culminar en el Puente de Alcántara, donde se ha desplegado una pancarta con el lema 'Queremos ríos vivos con agua para la vida', y en ella se han podido leer otras consignas como 'El Tajo agoniza', 'Las mafias del agua mienten y roban' o 'El río era antes que tú', entre otras muchos mensajes reinvindicativos.
Esta protesta, cuyos integrantes han definido como apolítica, la han protagonizado diferentes colectivos de toda la cuenca del Tajo para lanzar un mensaje de unión en esta lucha, por encima de fronteras geográficas y colores políticos, cuyo fin es defender "el agua como patrimonio común" y "ríos en buen estado".
PROMESAS POR CUMPLIR
El presidente de la Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo, Alejandro Cano, ha encuadrado esta protesta como la segunda en coordinación con los representantes de plataformas de ríos de Madrid, que también ven como sus aguas están en un "estado agónico, cadavérico".
No se ha mostrado muy optimista en cuanto a la planificación hidrológica el Tajo, señalando que una cosa son las "promesas y otra que se cumplan", denunciando una vez más que los caudales no respetan las cinco sentencias del Tribunal Supremo, "de a principio a fin del ciclo de la planificación".
"Pedimos que los ríos sean vivos, que sean agua para la vida. Son las arterias del terreno, y si están taponadas y empobrecidas, sus habitantes estarán empobrecidos y contaminados", ha sentenciado, del mismo modo que ha lamentado que las Tablas de Daimiel están "ya colapsadas y se están extendiendo regadíos por doquier".
Por su lado, la vicepresidenta de la plataforma, Laura Melgar, ha calificado el Plan Hidrológico del Tajo "como un avance", pero ha lamentado que "queda mucho por hacer". "Somos bastante realistas, los caudales que proponen, no en todos los tramos, incumplen las sentencias del Supremo. Deja bastante que desear".
También ha señalado que, aunque la ciudadanía --especialmente en la zona de Madrid-- va tomando más conciencia de esta realidad, la depuración en esta comunidad autónoma "podría mejorarse", porque "cumple con la normativa, pero podría ser más exigente".
NO HABRÁ MARCHA ATRÁS EN LOS CAUDALES
Por su parte, Nuria Hernández, de la Fundación Nueva Cultura del Agua, ha señalado que el agua "no debería ser un tema político", cuando existen cinco sentencias del Supremo "que hay que cumplir". En este punto, respecto a las próximas citas electorales, cree que no habrá marcha atrás en los límites de los caudales aprobados, pro sí "puede haber distintos cambios en su rapidez de implementación", según el partido que gobierne en la región y en el país.
De su lado, Melquiades Molinero, de la Asamblea para la defensa del río Tajo de Aranjuez, ha reclamado un "cambio de políticas" tras "40 años masacrando el Tajo desde la cabecera hasta la frontera con Portugal". "Ya es hora de devolver el río a la vida", ha afirmado, demandado un "régimen real y efectivo de caudales ecológicos, la recuperación de morfología del cauce y una adecuada depuraciones del agua de la zona metropolitana de Madrid".