El líder Tafa acaba con el Ciudad de Guadalajara en el primer tiempo (0-4)
El resultado al descanso era de 0-3 favorable a los visitantes.
No pudo conseguir ningún resultado positivo el Recuperaciones Alcarreñas frente al líder del grupo. El Tafa, muy superior, no dio opción al bloque entrenado por Juanjo Lozano y se llevó los tres puntos del Palacio Multiusos para ahondar todavía más la crisis del Ciudad de Guadalajara.
En el que era un partido contra un rival muy exigente, seguramente de los mejores de la categoría, el Ciudad de Guadalajara estuvo metido durante los diez primeros minutos en el partido, mientras que el Tafa no generaba demasiadas ocasiones de peligro.
El equipo visitante, poco a poco, fue comiéndole el terreno al Ciudad de Guadalajara. En los últimos dos minutos de la primera parte, el Tafaya hizo el 0-2 y el 0-3 para dejar el choque prácticamente visto para sentencia.
El segundo gol visitante nació fruto de una acción de estrategia, mientras que el tercero fue a raíz de un robo. Los de Juanjo Lozano decidieron emplear portero-jugador y, después de recuperar el balón Tafa, los foráneos se aprovecharon de un desajuste del Recuperaciones Alcarreñas que hizo que se fueran al descanso con un resultado muy adverso.
El Ciudad de Guadalajara, con los brazos ya caídos, comenzó a buen ritmo la segunda parte aunque sin ocasiones de peligro que destacar. A falta de cinco minutos para concluir el partido, el Tafa armó un buen contragolpe y metió el cuarto y definitivo tanto.
El próximo compromiso del campeonato liguero para los alcarreños será el sábado, a partir de las 19.00h ante Tauste. Será un pattido a cara de perro, en el que el Ciudad de Guadalajara se juega la vida, ya que es un rival directo por la salvación y que obligará al conjunto de Juanjo Lozano a dejarse la piel si quiere conservar la categoría.
A falta de seis jornadas para finalizar el campeonato liguero, Tauste y Ciudad de Guadalajara llegarán a la cita empatados a puntos (quince) y con solo un objetivo entre ceja y ceja: ganar para poder seguir optando a mantener la categoría y, de paso, dejar casi sin opciones a un rival por la permanencia.