Folklore alcarreño
Son días de mucho frío, como corresponde, pero también de orgullo por la salida de los personajes y el desarrollo de estos festejos, que en el caso de Santa Águeda sirve, además, para reivindicar que hay que seguir avanzando en materia de igualdad.
Primero fue La Candelaria, después san Blas y por último Santa Águeda, tres fiestas tradicionales que se celebran con sus particulares características en numerosos pueblos de la provincia, en algunos con la vitola de Interés Turístico, en todos haciendo gala de la riqueza cultural, costumbrista, histórica de una provincia que tiene en su folclore otro de sus grandes atractivos, recuperado ya en todo su esplendor después de la pandemia.
Cada semana el cronista provincial, Herrera Casado, que este mes de marzo cumplirá cincuenta años en tal responsabilidad, el etnógrafo, José Antonio Alonso, toda una referencia en el sector, y el historiador Tomás Gismera, con sus documentados artículos llenos de curiosidades, nos ilustran en Nueva Alcarria sobre estos temas con toda la autoridad que su sabiduría y experiencia les confieren. Por ello a nosotros solo nos queda disfrutar de sus plumas e invitar a nuestros lectores a hacerlo, así como también a contemplar el encuentro de botargas y enmascarados que este sábado tendrá lugar con motivo del adelantado pregón del Carnaval capitalino, otra fiesta que nuestro Ayuntamiento quiere revitalizar en su intención de dinamizar la ciudad.
Son días de mucho frío, como corresponde, pero también de orgullo por la salida de los personajes y el desarrollo de estos festejos, que en el caso de Santa Águeda sirve, además, para reivindicar que hay que seguir avanzando en materia de igualdad. La fantasía de convertir a una mujer en alcaldesa por un día para volver después a ser gobernada pasó hace mucho a la historia, siendo tal vez la política uno de los ámbitos donde mayores cotas de poder han alcanzado. Pero quedan techos de cristal que romper, prejuicios, discriminaciones o desigualdades que corregir y en este sentido, con la alegría de la fiesta, exaltando nuestro folklore, debemos entender esta fecha como ocasión para ahondar en la materia.