Frente común desde CLM, del Gobierno regional, organizaciones y sindicatos, al trasvase
Las reacciones al anuncio de la ministra de Agricultura no se han hecho esperar. Gobierno de CLM, ayuntamientos de Toledo y Aranjuez, la Asociación de Municipios Ribereños y los sindicatos CCOO y UPA han mostrado su oposición frontal a una nueva derivación desde la cabecera del Tajo al Segura. Además, más de 50 organizaciones han firmado un Pacto en Defensa del Agua que incluye su negativa a la política de trasvases.
Con las lluvias caídas en las últimas semanas, los pantanos de la cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía, han aumentado el agua embalsada lo suficiente como para abrir la posibilidad a nuevos trasvases. Este martes superaban los 400 hectómetros cúbicos, el mínimo que estipula el Memorándum del Tajo-Segura para poder autorizar derivaciones, y están en torno al 16% de su capacidad. El de Buendía rondaba los 236,60 hm³ y el de Entrepeñas los 174,9 este jueves, según los datos de Embalses.net. Hace 10 años, antes de que se aplicaran las normas del memorándum que aumentó la facilidad para aprobar trasvases, estas reservas eran de 750 hectómetros cúbicos.
Las voces de alarma se alzaron antes incluso de llegar a esta línea roja, viendo próxima la amenaza de una nueva derivación. No es extraño dado que el año pasado, los embalses acumulaban por las mismas fechas 452,70 hm³, un 18,320% de su capacidad, y el 11 de abril, en plena Semana Santa se aprobó un trasvase de 15 hm³.
Los peores temores se confirmaban este jueves. La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, admitía que el Gobierno tiene previsto autorizar un nuevo trasvase del Tajo al Segura a partir del 1 de abril, una vez que se reúna la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura y si se superan, tal como se espera, los 400 hectómetros cúbicos de agua almacenada. “No será en Semana Santa y tendrá que ser siempre como consecuencia de una propuesta de la comisión técnica que se reúne cada 1 de mes”, ha indicado Tejerina en una entrevista en la Ser recogida por Europa Press. Según ha explicado la ministra, “se evaluará la situación de los embalses y si están por encima de 400 hectómetros y lo estima la comisión, se autorizará un nuevo trasvase”. La ministra ha indicado que se dejarán “400 hectómetros en la cuenca y todo lo que esté por encima se procederá al trasvase”.
Según las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura, la situación con datos reales de los embalses del Tajo-Segura se calcula el día 1 de cada mes. En caso de superar esa barrera, antes de que se autorizase una nueva transferencia de agua, deberá reunirse la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura.
Será entonces cuando la Comisión elevará la correspondiente propuesta que deberá tener en cuenta no solo que se ha pasado a nivel 3 sino también la previsión técnica de las aportaciones futuras de agua, para garantizar la satisfacción de las necesidades de la cuenca cedente, de acuerdo con lo indicado en la propia ley, según han explicado a Europa Press fuentes ministeriales.
El último trasvase que se realizó desde los embalses Entrepeñas-Buendía al Segura se autorizó el 10 de mayo de 2017, por un total de 7,5 hectómetros cúbicos, ya que después de esa fecha los embalses bajaron de los 400 hectómetros cúbicos de agua almacenada.
CLM necesita agua
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha asegurado este jueves que “Castilla-La Mancha también necesita el agua”, a la vez que ha lamentado que el Gobierno de Rajoy haya resucitado el trasvase coincidiendo con el Día Mundial del Agua. El consejero ha afirmado que “es de sentido común que el agua tiene que generar desarrollo en todos los territorios, pero primero está la cuenca cedente” y ha recalcado que “los embalses de la cabecera del Tajo están al 16 por ciento”.
El consejero de Agricultura consideraba que es “un día poco apropiado” para hacer anuncios como éste, cuando hace poco estábamos en una situación de “extrema de sequía” en Castilla-La Mancha que “evidentemente, también nos afecta hoy”.
Según ha informado la Junta en un comunicado, ha insistido que “cualquier persona con sentido común se da cuenta que no se puede, ni se debe autorizar un trasvase” a la vez que ha recordado que hay recursos públicos “que se invirtieron en las desaladoras y que hoy no están al 100 por cien de funcionamiento”.
“Basta ya de regates cortos en política para transmitir mensajes erróneos al conjunto de la ciudadanía”, ha instado el titular de Agricultura en Castilla-La Mancha, quien ha explicado que “no se puede hacer política siempre con un trasvase y reducir el discurso político, exclusivamente, a reivindicar un trasvase que no va a resolver el problema y que es pan para hoy y hambre para mañana, también para el Levante”. El Gobierno de Castilla-La Mancha, ha puntualizado Martínez Arroyo, pide que, en todo caso, “se garantice la preferencia de la cuenca cedente sobre otros usos”.
Además, ha reiterado la mano tendida, para “llegar a un acuerdo en España entre todos”, pero ha advertido de que “en Castilla-La Mancha vamos a defender con uñas y dientes el interés de los ciudadanos”, haciendo hincapié en que “incluye a todos los partidos políticos de la región y a todo el tejido económico y social de Castilla-La Mancha, porque el agua que está en la comunidad autónoma tiene que ayudarnos primero aquí”.
Un trasvase anunciado
El presidente del Gobierno regional, Emiliano García-Page, avisaba ya a principios de semana de que el Gobierno central aprovecharía la Semana Santa para llevarse “las primeras cuatro gotas que estén por encima de los 400 hectómetros”, al tiempo que se preguntaba qué pasará cuando llegue el verano y, con ello, las restricciones de agua en la región.
“Estamos en la obligación de hacer que se mantengan las reservas y las previsiones de cara al futuro también en Castilla-La Mancha”, aseguraba García-Page, antes de criticar el excesivo “nivel de dependencia del cielo” que existe en Murcia y Levante, cuando lo lógico sería usar al máximo rendimiento las desalinizadoras “y no al 30 por ciento”, como ocurre en algunos casos. Se pregunta “de qué están bebiendo y regando” en el Levante en estos momentos en los que no se está usando este trasvase.
Considera “increíble” la obsesión de ver “hasta dónde se recarga un pantano”, cuando existen otras soluciones como las desalinizadoras, “en las que hemos gastado un dineral. Primero debemos agotar estas posibilidades, y luego coger agua a otros ríos”, indicó. Recuerda que en los últimos 15 años se han invertido 600 millones de euros en desaladoras que están sin optimizar, algo que califica de “barbaridad”. En este sentido, volvió a exigir que el trasvase Tajo-Segura sea una “solución in extremis, pero no ordinaria”.
Este debate, ha añadido, está “sobrepasado por la realidad científica”, puesto que las desalinizadoras darían agua y ello evitaría quitársela a municipios de Castilla-La Mancha. Por ello, si se habla de cesiones, deben ser considerados todos los ríos “y, sin embargo, se sigue queriendo esquilmar sólo un río, que ni siquiera en sus mejores momentos ha estado en la capacidad que dicen las leyes”, ha criticado el presidente regional.
Finalmente, pide que en Levante se tenga en cuenta la “sobreexplotación permanente” que siempre ha tenido el río Tajo y ha considerado que, un acuerdo importante en España, sería aquél en que todos los partidos se comprometan a aplicar la legislación europea. De cualquier manera, se ha considerado esperanzado porque esta “batalla” a medio y largo plazo “está ganada”, ya que la sostenibilidad del planeta y las directrices europeas “van por este camino” y es evidente que el trasvase Tajo-Segura “no tira”.
“Agua para todos”
El presidente regional se ha vuelto a declarar “antitrasvasista” y se ha cuestionado si el trasvase Tajo-Segura se llevaría cabo en caso de que tuviera que hacerse en la actualidad. “Se hizo porque había dictadura, porque era imposible oponerse, por eso ha sido imposible ningún otro trasvase en democracia”, ha manifestado.
En este sentido, ha criticado que, cuando se habla de trasvases, “sólo se habla de un río y de una zona de España, la zona más seca”, en referencia al río Tajo y a Castilla-La Mancha. Por ello, se ha dirigido “a los españoles que viven en Murcia, en Valencia, en Alicante o en Almería” diciéndoles que quiere “que haya agua para todos”. “Pero eso también significa que haya para nosotros”, ha concluido.
“Como buitres”
Por su parte, el diputado del Grupo Parlamentario Socialista Emilio Sáez ha lamentado también el anunciado trasvase y ha dicho que al “igual que los buitres esperan a que muera el animal para agarrar su carne, han esperado a que los embalses de cabecera tuvieran 400 hectómetros cúbicos para volver a transferir agua a Murcia y Valencia”. “Llevamos 40 años siendo solidarios y contribuyendo al desarrollo económico, agroalimentario y turístico del Levante español, que ha ido en detrimento de Castilla-La Mancha. Por eso nuestra obligación es defender los intereses de la región”, ha dicho el diputado socialista
Municipios Ribereños, Toledo y Aranjuez
Los ayuntamientos de Toledo, Aranjuez y la Asociación de Municipios Ribereños han lamentado este jueves el anuncio de la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel Tejerina, sobre el trasvase del Tajo que prevé aprobar en abril, al tiempo que han lamentado la “falta de sensibilidad” del Gobierno central.
“Rechazamos de manera enérgica la medida adoptada por el Gobierno de España ya que supone iniciar de nuevo un ciclo trasvasista que conduce a los pueblos y ciudades del Tajo a ver mermado su patrimonio medioambiental y sus posibilidades de un desarrollo social sostenible, condenando a algunos de ellos a un empobrecimiento socioeconómico de sus recursos”, apuntan en un comunicado conjunto.
Asimismo, han criticado que el Gobierno haya esperado a que las reservas superen “apenas el límite legal establecido” para autorizar una nueva derivación sin tener en cuenta “los graves perjuicios que se están causando en la cuenca cedente, renunciando con ello a la regeneración natural del río”.
Consideran de esta forma “una temeridad” abocar al río a su “muerte definitiva” dar el visto bueno a un trasvase de agua cuando se atraviesa “uno de los periodos de sequía más aguda de los últimos años”. “Entendemos que esta circunstancia debe ser definitiva para evitar nuevos trasvases ya que se estaría hipotecando el futuro del Tajo y de los municipios ribereños durante los meses secos, cayendo en los mismos errores del pasado”, añaden.
Exigen, por tanto, a la Confederación Hidrográfica del Tajo, Juan Carlos de Cea, y a su presidente que defiendan la cuenca del Tajo y dejen de hacer “oídos sordos” a las “justas reivindicaciones” de los vecinos de los municipios de la ribera.
Por ello, le piden que atienda, según marca la Ley de Aguas en su artículo 60, la orden de preferencia de usos del agua de los embalses, priorizando las necesidades reales del Tajo y de los municipios ribereños frente a la demanda de agua de otras cuencas.
Finalmente, exigen “encarecidamente” al Gobierno de España que no ceda a las presiones del Levante y que el presidente, Mariano Rajoy, desautorice a su ministra negando la aprobación de un nuevo trasvase, permitiendo de esta manera la regeneración natural del Tajo.
El Ayuntamiento de Toledo aprobó ayer en el pleno ordiniario su rechazo al trasvase.
CCOO
El secretario regional de Comisiones Obreras (CCOO) en Castilla-La Mancha, Paco de la Rosa, ha expresado este jueves un "no categórico al trasvase Tajo-Segura" y ha adelantado que desde el sindicato apoyarán a cualquier iniciativa que lleve "a elaborar un pacto del agua que piense en primer lugar en el medio ambiente y las personas, y en último lugar en las situaciones económicas".
Al respecto, De la Rosa ha indicado que la política es la que tiene que tomar decisiones en materia de agua y "para ello se tiene que hablar de cualquier alternativa hidrográfica que sea mejor para la vida de los ríos y de las personas como puede ser las desaladoras".