Iriépal saca pecho con su Pasión Viviente

16/04/2019 - 19:06 Marco de Mesa Cáceres

El pasado sábado 13 de abril se representó la "III Pasión Viviente de Iriépal 2019", organizada por su Alcaldía Pedánea y el Grupo de Teatro "El Lavadero", con la colaboración del Patronato de Cultura y el Ayuntamiento de Guadalajara.

En su tercera edición, el barrio anexionado volvió a transformarse un año más en aquel Jerusalén de hace dos mil años. Dicha transformación se logró gracias al esfuerzo y la ilusión de muchos de sus vecinos que vieron en pocas horas como su Ayuntamiento se transformaba en un pretorio romano y sus toriles en un palacio hebreo.

Bajo la dirección artística de Ana Ruiz y técnica de César Maroto, Julio Prego volvió un año más a encarnar el personaje de Jesús de Nazaret, acompañado de un reparto de docenas de actores y figurantes. Todos los apodados "pasionarios" estaban debidamente caracterizados gracias, en gran parte, al buen hacer del grupo de "costureras", bautizado con el cariñoso nombre de "Velvet" en referencia a una conocida serie televisiva.

El buen tiempo fue también protagonista desde la primera escena en la que el personaje de Jesús entraba en la Plaza del Ayuntamiento acompañado de sus doce apóstoles, siendo aclamado por la muchedumbre. Parábolas y pasajes bíblicos reconocibles, como el protagonizado por un hombre rico, estructuraban esta escena inicial articulada en un escenario cedido por la Diputación de Guadalajara. A continuación, el teatro de calle daba paso en el Lavadero de Iriépal a una "Última Cena" íntima y cercana, con un público emocionado en cada uno de los cuatro pases realizados. Los tickets para esta escena, adquiridos con anterioridad previo donativo para llevar a cabo un control del aforo, se agotaron en cuestión de minutos. A escasos metros andando, en una zona de olivar que emulaba Getsemaní, el beso de Judas desencadenaba el prendimiento del nazareno a manos de los soldados romanos. Nuevamente en la Plaza del Ayuntamiento, tenía lugar el juicio del reo con la participación de Caifás, Poncio Pilatos o Barrabás. Tras ser declarado culpable, se iniciaba un "via crucis" en el que Prego iba acompañado de María Madre, María Magdalena, el apóstol Juan, los ladrones Dimas y Gestas, sayones, la guardia romana y veinticuatro antorcheras. Al caer la noche, desde la denominada "Explanada del Olmillo", en torno a un millar de asistentes pudieron contemplar la crucifixión llevada a cabo en un cilate. En ese momento, muchos de los participantes de la Pasión Viviente conformaban en este escenario natural una asombrosa e impactante estampa que ponía el broche de oro al evento teatral.

Durante toda la tarde, la representación estuvo salpicada de microescenas como la lapidación de María Magdalena, las negaciones de Pedro, la entrada de Pilatos y su esposa Claudia Prócula al pretorio romano, el ahorcamiento simbólico de Judas Iscariote o los pasajes protagonizados por Verónica y Simón de Cirene.

La Pasión "bubilla" contó además con la inestimable participación en directo del "Coro de Pasión", de la agrupación musical "Santísimo Cristo del Amor y de la Paz" y de los tambores de "La Pasión del Señor".

Al día siguiente, Iriépal volvía al presente, al Domingo de Ramos de su Semana Santa, no sin vislumbrar en el horizonte la IV Pasión Viviente de 2020.