Las Nuevas Generaciones del PP no olvidan, y rinden homenaje a Miguel Ángel Blanco en un emotivo acto en Azuqueca

14/07/2018 - 13:59 Redacción

Insisten en la necesidad de recordar a las víctimas del terrorismo de ETA y de preservar su memoria con dignidad y justicia.

En el 21 aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, las Nuevas Generaciones del PP de Guadalajara han vuelto a recordar la figura del que fuera concejal de Ermua, vilmente asesinado por la banda terrorista ETA.

Ha sido en Azuqueca, junto al monolito que recuerda a las Víctimas del Terrorismo, donde un nutrido grupo de personas han rendido homenaje a uno de los cientos de personas que en España murieron a manos de los terroristas por defender la libertad y la democracia. Miguel Ángel Blanco, presidente de honor la NNGG a nivel nacional, es recordado cada año por la organización juvenil coincidiendo con el aniversario de su asesinato.

“Nosotros no olvidamos. No vamos a olvidar nunca, y vamos a defender los derechos, la dignidad y el honor de las víctimas, cuya memoria está siendo vilipendiada por un Gobierno que ha decidido unirse a quienes no respetan la libertad”, ha asegurado la presidenta del Partido Popular de Guadalajara, Ana Guarinos, que ha asistido al acto celebrado en Azuqueca, junto al máximo responsable de NNGG en esta provincia, Sergio Sánchez –quien se ha referido a la necesidad de mantener viva la memoria de Miguel Ángel Blanco y lo valores que representa-; y a Mane Corral, coordinador regional de la organización juvenil, encargado de abrir el acto señalando la importancia de dar continuidad cada año a este homenaje.

Aure Hormaechea, portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento azudense; la senadora Marta Valdenebro; el diputado provincial Lucas Castilllo, y el vicealcalde de Guadalajara, Jaime Carnicero, han estado también presentes en la concentración de Azuqueca; así como otros miembros de Nuevas Generaciones de Guadalajara y del Partido Popular. Todos han pedido memoria, dignidad y justicia para que no caiga en el olvido el espíritu de Ermua.