Los ribereños ya tienen a su alcance su ‘sueño’ de beber agua del Tajo

21/08/2022 - 17:24 FCV

El sueño del medio centenar de municipios colindantes a los embalses de Entrepeñas y Buendía de recibir un agua de calidad y cantidad suficiente desde la cabecera del Tajo está a punto de ser realidad. El Ministerio de Transición Ecológica, a través de Tragsa, ya está realizando las comprobaciones oportunas en la potabilizadora, tomas y bombeos para que la entrega de ‘llaves’ se produzca con plenas garantías. FOTO: MORILLEJO.ES

Tras superar el último bache relativo a imprevistos sobre acometida de una línea eléctrica en el término de Cifuentes, ya no hay marcha atrás: a finales de año todos recibirán la misma agua cristalina del Tajo, gracias a una captación acometida en Morillejo, y olvidarán sus dificultades de abastecimiento, derivadas, cada uno en su caso, del mal estado de redes en alta o baja, depósitos, captaciones y sistemas de bombeo. Se trata de un gigantesco  dispositivo de suministro de cientos de kilómetros de tuberías, consecuencia de una inversión de 75 millones de euros, que se complementa con un proyecto, ya en marcha, de arreglo de los sistemas en baja, por importe de 40 millones de euros. 
    

Todo se realiza de forma simultánea para revertir una histórica ironía, la de medio centenar de  pueblos que, estando al lado de Entrepeñas y Buendía, dos de los embalses más grandes de la península, tenían unos suministros precarios, mientras que el agua se enviaba de forma abundante al Segura a través del canal del trasvase. Unos, provenientes de pozos, otros de arroyos, que en muchas ocasiones se secan, lo que provoca buscar en precario otras alternativas o captaciones que son inoperativas cuando el nivel de los pantanos baja drásticamente en momentos de sequía. 


“Son suministros que en 2022 son anacrónicos, y que representa un problema que se había estancado y que se agdiza por la situación de pertinaz sequía derivada del cambio climático”, ilustra Miguel Ángel Sánchez, técnico de la Asociación y Mancomunidad de Municipios Ribereños. Esta situación ha obligado, durante incontables veranos, a sufrir restricciones de agua y recibir el abastecimiento de las cisternas de Diputación provincial, en el peor de los casos, cuando ya no hay.
  

El denominado proyecto de Abastecimiento a la Futura Mancomunidad de aguas de los núcleos colindantes con los embalses de Entrepeñas y Buendía es un sistema complejo, que ha requerido una inversión de cerca de 75 millones, y que contempla todas las infraestructuras necesarias para recoger el agua del río Tajo y distribuirla entre el medio centenar de municipios de la zona. Para gestionar el servicio de suministro de agua en alta para el abastecimiento desde la cabecera del río Tajo hasta sus depósitos locales se ha creado la Mancomunidad de Aguas de Municipios Colindantes de los Embalses de Entrepeñas y Buendía.

Los trabajos, que han sido fruto de 15 años de sinsabores, incluidas paralizaciones de obra, han consistido en la ejecución de una tubería de salida de agua de un kilómetro y medio de longitud, que se acomete a un metro por debajo de la lámina de un azud de entre los términos de Morillejo y Carrascosa de Tajo. El objetivo: almacenar caudal para que se pueda bombear a los municipios beneficiarios del plan situados en las provincias de Guadalajara y Cuenca. Desde la captación, una bomba hidráulica elevará el caudal hasta Morillejo, desde donde se enviará a la potabilizadora de Peralveche, para posteriormente discurrir por gravedad a través del entramado de tuberías y depósitos reguladores que abastecerán a las localidades beneficiarias y cuya población total supera los 40.000 habitantes.
    

Paralelamente se ha acometido un puente de servicio de 18 metros, que une las dos orillas del Tajo y que permitirá acceder y cruzar el pantano, evitando de esta manera un rodeo de 20 kilómetros. Igualmente se han acometido las obras de canalización entre Morillejo y Peralveche, además del tramo Pareja-Chillarón del Rey y entorno del viaducto de Durón.
   

La Confederación Hidrográfica del Tajo incluyó modificaciones en el proyecto constructivo, que derivaron en una ampliación del sistema de abastecimiento a las localidades de Solanillos del Extremo, Cifuentes, El Recuenco, Pozuelo, Albalate de Zorita o Almonacid de Zorita, entre otras. Además de estos municipios, se encuentran Alcocer, Alhóndiga, Alique, Alocén, Arbeteta, Auñón, Berninches, Budia, Castilforte, Chillarón del Rey, Cifuentes, Durón, El Olivar, Escamilla, Fuentelencina, Mantiel, Millana, Pareja, Peñalver, Peralveche, Sacedón, Salmerón, San Andrés del Rey, Trillo y Valtablado del Río, Albendea, Arandilla del Arroyo, Buendía, Priego, Puebla de Don Francisco, Salmeroncillos, San Pedro Palmiches, Valdeolivas y Vindel.
    

De la misma forma, se han dejado aparcados entre cuatro y seis millones de euros para que la ampliación pueda llegar hasta localidades como Huete, cuyo suministro, a base de manantiales y fuentes, es muy precario, aprovechando su cercanía a las plantas del Guadiela y Morillejo. “Se trata de optimizar al máximo la inversión realizada para que llegue a todos los pueblos de la zona que tengan dificultadas en el suministro”, apunta desde la asociación ribereña Miguel Ángel Sánchez. 
  

Desde el inicio de legislatura, los gobiernos central y autonómico llevan trabajando en un proyecto que estaba parado. La línea de repotenciación de electricidad para la intraestructura localizada en Cifuentes era imposible de instalar en las condiciones que se preveía. Se quería soterrar y no era factible porque pasaba por un yacimiento arqueológico. Finalmente, se ha decidido optar por la ejecución de las obras de una línea aérea, que están a punto de acabarse. 
    

Esto ha sido posible gracias a que el Ministerio de Transición Ecológica ha comprometido una cantidad próxima a los tres millones de euros para poder finalizar la infraestructura. “En los siete años antes del Gobierno  del PP se habían paralizado las obras y se tuvo que indemnizar a la empresa adjudicataria Acciona”, recuerda el vicepresidente de la Asociación de Municipios Ribereños, Borja Castro.  “Es ahora cuando se ha comprometido el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, a terminar esa infraestructura de abastecimiento que va a asegurar en cantidad y calidad el agua para los municipios ribereños a corto plazo, a la vuelta de la esquina”, opina. 
    

Este logro se produce  tras la reunión de los pueblos ribereños con la Dirección General del Agua, “y el compromiso fue que esas obras estuvieran acabadas en octubre, se puede demorar un mes, semanas, pero ese compromiso está y lo tenemos a la vuelta de la esquina; después de tantos años es este Gobierno el que va a finalizar las obras”.