Lucha contra el cáncer

Alrededor de la mitad de personas que sufren un cáncer consigue superarlo pero la otra mitad termina falleciendo. Hace no muchos años eran tres de cada cuatro los que no sobrevivían y ahora se trabaja para alcanzar el 60% de curación, objetivo muy difícil porque algunos tipos de tumores tienen una mortalidad muy elevada, pero factible. Son cifras terribles y lo peor es que detrás de cada caso hay un ser humano y un círculo afectivo que sufre.

    El presidente nacional de la Asociación Española contra el cáncer vino a inaugurar la nueva sede de Guadalajara, fuera ya del centro de salud del Ferial, en Santa María Micacela, más grande, luminosa, abierta por las tardes, con toda la información y los servicios posibles al alcance de enfermos y familiares, un lugar con luz, colores agradables, ambiente cariñoso y cercano para afrontar con más herramientas y ánimo el diagnóstico y evolución de esta patología. En el recuerdo los inicios de esta asociación en nuestra provincia, en los años cincuenta, cuando ese primer lugar de reunión de directivos y voluntarios fue el domicilio de nuestro abuelo, Salvador Embid. Desde entonces han sido muchos los que han puesto su grano de arena para ir haciendo cada vez más cosas. A todos, los de ayer y los de hoy, a los alrededor de 4.000 asociados, gracias. 

  Prevención para una detección precoz que permita afrontar el tratamiento desde un estadio inicial e investigación para mejorar la respuesta médica son los dos instrumentos. En nuestras manos está asociarnos, participar en distintas propuestas como el concierto de boleros de esta noche, a diez euros, en el Buero Vallejo, porque don dinero es esencial para que todos, porque este mal no es de ricos o pobres, jóvenes o mayores, hombres o mujeres ni de gente de una u otra raza, podamos tener mejores perspectivas a la hora de pelear contra cualquiera de sus variedades. Asociémonos.