“Nadie puede imaginarse lo duro que ha sido, sólo los que lo hemos vivido”

22/05/2020 - 10:59 J.E.

Jesús Ángel Carretero Sáez, funerario, comenta que se enfada mucho cuando ve a la gente saltarse el confinamiento.

La principal y peor consecuencia del Covid-19 ha sido el aumento significativo del número de fallecidos, y esto ha repercutido de manera directa en los trabajadores de funerarias. Este es el caso de Jesús Ángel Carretero Saez, funerario trabajador de Mémora. 

Cómo en la gran mayoría de los casos, no esperaba lo que ocurrió, y el volumen de trabajo en su caso creció de una manera increíble: “Se nos echó encima y hemos estado trabajando cinco veces más de lo que solemos trabajar normalmente. Teníamos una masa de féretros tremenda”. Jesús Ángel comenta que “esto no se lo imaginaba nadie, aquí trabajamos por grupos de cuatro, y hemos tenido que multiplicarnos”.

Han sido unas semanas muy duras para los trabajadores de las funerarias, sobre todo, en el trato con los familiares de los fallecidos: “Lo primero que hacíamos era identificar a los difuntos, para que estuviesen identificados al llegar al tanatorio”. El sistema de trabajo ha sido el siguiente: “Se recogía con el féretro en el hospital o en la residencia, se identificaban, y se subían a la cámara”, pero pese a ello, existían dudas porque “los familiares preguntaban que cómo sabían que ese féretro que iba a entrar al crematorio era su padre o su madre. Ha sido muy difícil porque ellos querían ver a sus seres queridos y saber si eran ellos, pero nosotros teníamos que comentarles el protocolo existente con mucha mano izquierda”. Sin embargo, pese a la dificultad del momento, Jesús Ángel destaca el comportamiento de la gente porque “en mi caso no he tenido problemas”.

 

 

Inimaginable
A nivel personal, este funerario comenta que “ha sido muy duro, hemos trabajado muchas horas, no se lo puede imaginar nadie más que los que lo hemos vivido”, por este motivo, sufre cuando ve que la gente se salta el confinamiento y las directrices dadas para superar la pandemia, y afirma que “con que hubieran estado un par de horas trabajando conmigo una mañana, no harían eso, hemos estado subiendo fallecidos del hospital hasta de cuatro en cuatro, me enfada muchísimo”.

La nota positiva la ponen los datos esperanzadores que estamos teniendo en las últimas semanas, algo que Jesús Ángel asegura que han notado “muchísimo”, de hecho destaca que “ya se está velando, se están acondicionando los fallecidos salvo que hayan tenido Covid-19 o sean sospechosos de haberlo tenido”.

 

 

Protección

Aunque es inevitable albergar cierto optimismo por la disminución en el número de fallecidos y de contagios, no hay que relajarse porque esto aún no se ha acabado. Es un mensaje que quieren repetir los trabajadores que han estado, y que siguen estando en la primera línea luchando contra el Covid-19. De hecho, Jesús Ángel afirma que “nosotros seguimos trabajando igual, con las mismas medidas de seguridad a la hora de realizar nuestro trabajo, la gente no sabe lo que es esto, no podemos relajarnos”. También agradece a Mémora que, desde el primer momento, han contado con material de protección para poder trabajar con seguridad, y de hecho, nadie ha estado de baja ni ha presentado ningún síntoma relacionado con el virus.