Niños Mutantes preparan su carta de ajuste: "Nuestra mayor mutación es haber dado sentido a nuestro nombre"
Niños Mutantes --Juan Alberto, Andrés, Nani y Miguel-- se encuentran inmersos en la gira que les llevará a despedirse de su público tras 30 años de carrera musical, que encaran con una sensación de "agradecimiento total". "Hemos disfrutado muchísimo".
Así se han pronunciado en una entrevista concedida a Europa Press justo antes de sus actuaciones en el Low Festival y en el Festival Gigante, en la que repasan estas tres décadas de carrera, cómo están preparando estos conciertos o cómo han cambiado en estos 30 años.
PREGUNTA: ¿Por qué decidís dejarlo ahora tras 30 años de carrera?
RESPUESTA: Después de muchos meses hablando de esto, con mucha gente a nuestro alrededor, la frase más repetida es que hay síntomas de cansancio en la banda, en el grupo, en la marca... No queremos repetirnos a nosotros mismos e intentamos irnos cuando todavía estamos arriba, cuando todavía la gente nos quiere. Me quedo con esa sensación de que era el momento, de que hay un cansancio entre nosotros y un cansancio de la misma marca de Mutantes. No queríamos que ese cansancio empezase a notarse mucho en nuestras vidas o en nuestras giras.
P: ¿Podríais destacar los mejores y los peores momentos que habéis vivido en la banda?
R: Son infinitos pero en 30 años nos ha dado para muchos más mejores momentos que para malos momentos. En los malos momentos están presentes que hemos tenido peleas y broncas desagradables, o algún concierto en el que nos hemos encontrado con que estábamos nosotros y pocas más personas. Pero realmente en estos 30 años tenemos muchos más momentos felices como en el Sonorama donde hemos tenido muchas noches míticas, en las grabaciones de discos como los cuatro seguidos grabando en la Alpujarra granadina o cuando tocamos en Colombia, Panamá y Venezuela. Pero también puede haber un momento mágico un día, entre semana, cuando vas al local de ensayo y sale una canción mágica y empieza a flotar. No hace falta nada espectacular. Por eso hemos estado 30 años en esto, porque la música nos ha regalado infinitos momentos mágicos.
P ¿Cuándo empezasteis con esto hace 30 años, soñasteis en algún momento con vivir de la música?
R: Lo hemos pensado en numerosas ocasiones, pero no hemos coincidido nunca en el tiempo en el que cada uno lo tuvo más claro. Es decir, había un momento en el que uno tenía el empuje y los demás no lo tenían tan seguro, y al revés. Y creo que esa ha sido la historia de los Mutantes. Estoy muy contento de todo lo que hemos vivido, de lo que hemos disfrutado y de haber tenido los pies en dos sitios, que nos han mantenido con los pies en el suelo en esta carrera musical, que hay veces que hace que pierdas la cabeza. Y nosotros, afortunadamente, no la hemos perdido demasiado.
Llevamos 30 de trayectoria y la gente dará por supuesto que llevamos como 20 dedicándonos en exclusiva a la música. Y es triste que un grupo con la relevancia que nosotros hemos llegado a tener no hayamos sido todos profesionales de la música porque en este país es muy complicado vivir dignamente de la música. Vivir solo de Niños Mutantes era una tarea muy difícil, yo creo que es una pena y habla mal de este país la situación en la que estamos los músicos, que tenemos que estar o a niveles de subsistencia o pluriempleados, o en la cúspide o con el respaldo de una fortuna familiar o algo así. Ojalá eso cambie y las bandas nuevas que vayan apareciendo no tengan que pasar por situaciones como la que hemos pasado nosotros.
P ¿Si volvierais a empezar de nuevo habría algo que haríais de otra manera?
R: ¿Qué más da? Hemos hecho lo que hemos hecho. No habremos equivocado en muchas cosas, pero también es verdad que 30 años después hemos llegado a donde hemos llegado, tenemos el cariño de muchísima gente, la gira de despedida está siendo una barbaridad y tenemos el respeto de crítica y público. Además, nuestro legado musical queda ahí para muchísimas personas que lo sienten así, que lloran con nosotros, que nos envían unos mensajes increíbles, que nos hacen emocionarnos y llorar y eso es lo que tenemos. Podríamos estar más arriba, más abajo, podríamos no estar. Da igual, no creo que tenga ninguna relevancia si nos equivocamos o no nos equivocamos.
Creo que además lo bueno de la despedida es que nos ha forzado a hacer balance y nos ha llevado a quedarnos con la conciencia tranquila, con la sensación de que hemos cumplido la misión que nos habíamos planteado. Ahora todo se coloca en su sitio y al poder hacer nosotros balance, podemos ver, sobre todo, el balance que hace la gente y el cariño que nos transmite.
La sensación es de agradecimiento total a esta vida que hemos podido vivir, que hemos disfrutado muchísimo. Pero sí es cierto que hasta que no hemos parado uno no se da cuenta de lo grande que era eso, de las cosas tan buenas que nos estaban pasando y ahora cuando de repente decides parar y echar la vista atrás dices: Si es que hemos hecho unas cosas increíbles.
P: ¿Estáis afrontando de una manera diferente o especial esta gira?
R: La manera de afrontar esta gira es diferente porque no hay ningún planteamiento, nada más que el de disfrutar, que creo que es lo que estamos haciendo. Que no quiere decir ni mucho menos que antes no disfrutáramos. Pero es cierto que hay condicionantes que ahora nos dan igual. Somos cinco personas encima de un escenario disfrutando a tope, mirándonos y realmente transmitiendo lo que creo que durante mucho tiempo hemos transmitido.
P: ¿Hay alguna canción que notéis que el público disfruta más en vuestros conciertos?
R: Ha habido varias, pero sobre todo 'Errante' es una canción que cuando la tocas, pues la gente se vuelve loca. Es nuestra canción más conocida, son muchos millones de escuchas en Spotify y es una sensación, cuando la tocas que, por una parte dices, hostia, podría estar así de emocionado todo el concierto, igual que con esta canción, y a veces te sientes un poco esclavo de ella. Pero ahora mismo, y en este momento en el que estamos, sobre todo te sientes agradecido, te sientes infinitamente agradecido a donde nos ha hecho llegar, la de puertas que nos ha abierto y la de corazones en los que ha entrado esta canción.
P: Esta y otras canciones estarán en los conciertos finales de Madrid y Granada ¿Nos podéis adelantar un poquito qué va a pasar?
R: Tenemos ahora mismo un debate interno sobre cómo van a ser esos conciertos finales. Sí sabemos que tienen que ser conciertos muy especiales, con un recorrido mucho más largo que lo que solemos hacer. Los primeros discos prácticamente no los tocamos en los últimos años y tenemos que agradecer a los fans que llevaban más tiempo con nosotros, que están desde el 98 o desde el 2000 y tienen que tener su momento con canciones que estaban en el desván y hemos tenido que quitar cinco cajas con cuatro capas de polvo para sacarlas. Pero también la última etapa. Se hace muy difícil porque son 12 discos, como 150 canciones y nadie va a tener las canciones que quiera escuchar en el último día, pero las que estén yo creo que la mayoría le llegarán a todos.
P: ¿Cómo habéis mutado en estos 30 años? ¿Qué transmutaciones habéis tenido y hacia dónde van las corrientes mutaciones?
R: La mayor mutación de Niños Mutantes es que después de 30 años le hayamos dado sentido al nombre. Nunca me paré a pensar en el sentido etimológico de Niños Mutantes y ahora cualquiera que se lo diga ya tiene un significado por sí mismo. Tiene una entidad que ha mutado a algo que tiene un significado más allá de lo que es, y a día de hoy el habernos convertido en esos niños mutantes, que seguimos siendo más niños que cuando empezamos y más mutantes ahora, sin duda, es la mayor mutación.