“No hay pretexto para que el Gobierno rechace una parada de tren en Alovera”
Según el portavoz de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Convencional, Pedro Rubio, el apeadero de Alovera es factible. Y necesario, ya que daría cobertura no solo a la localidad campiñera, sino a Quer, Chiloeches, Cabanillas, Villanueva, Torrejón, El Casar o Marchamalo.
La plataforma recientemente creada para su logro, conformada por todos los partidos políticos con presencia en la Corporación Municipal, lo sabe.
Con 41 años de experiencia como ferroviario a sus espaldas ha pasado por diferentes cargos, tanto en Renfe, como con el gestor de infraestructuras ferroviarias (ADIF). Entre otros, jefe de Estación, inspector principal, supervisor del área Madrid-Guadalajara-Zaragoza-Barcelona-frontera con Francia y miembro de la Comisión Nacional de Seguridad en la Circulación, entre otros.
Asegura que, antes de 2005, debido a que el sistema de bloqueo era telefónico, “sólo podía haber un tren entre estación y estación”, lo que podría ser un argumento técnico para la denegación del apeadero.
Sin embargo, a partir de ese año, se aplica un procedimiento electrónico e informático denominado “cantones” con el que se regula la distancia entre las unidades para que no choquen entre sí. Ello que implica que el tráfico pueda incrementarse de manera totalmente segura y, por tanto, el tiempo de dilación con una nueva parada es “totalmente asumible”, uno de los tradicionales argumentos, junto a la población insuficiente, utilizados por ADIF para denegar el apeadero. A esto se suma que el tramo Guadalajara-Azuqueca es el menos transitado de la línea C2, es decir, “el número de trenes por vía no está saturado”, ilustra Rubio.
Por tanto “no hay pretexto”, subraya, “porque además hay apeaderos en la Comunidad de Madrid que se han ejecutado con mucha menos población que Alovera que, con más de 12.000 habitantes, es la tercera localidad en población de la provincia”.
Pedro Rubio da las claves para que la iniciativa sea un éxito. Hay que hacer que se impliquen las instituciones, enviando escritos a las Cortes de Castilla-La Mancha, Junta y Diputación Provincial, así como los organismos implicados, Renfe, “que como propietaria de los trenes tiene que autorizar la parada” y ADIF, “que tiene que habilitar la malla para la circulación”. Asimismo habrá que enviar copia al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.