Patrimonio mundial
La preocupación hoy de los seguntinos es cómo quedará su -nuestra- querida Alameda que ha empezado a experimentar una remodelación integral.
Nos encontramos, de nuevo, pasando unos días de asueto en una de las ciudades más bonitas posible, candidata a ser Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, reconocimiento oficial a lo evidente. Arcos, travesañas, conventos, colegios, iglesias, una Catedral entre las diez mejores de España, un Parador Nacional de Turismo de privilegio, estrellas Michelin, restaurantes con la mejor elaboración de la cocina tradicional castellana y un parque centenario en plena rehabilitación, sin entrar en los pinares y entornos que la rodean… todo es arte, encanto, belleza, en Sigüenza, que acaba de celebrar de forma brillante sus ferias medievales y pronto disfrutará de las fiestas patronales con la procesión, de Interés Turístico Regional, de los Faroles, porque no falta cultura, historia y tradición en una ciudad que en 2024 celebrará el 900 aniversario de su Reconquista.
La preocupación hoy de los seguntinos es cómo quedará su -nuestra- querida Alameda que ha empezado a experimentar una remodelación integral, una rehabilitación que saneará no solo redes de agua o alumbrado, sino la estética y disposición del parque. Los más nostálgicos temen la pérdida del encanto que atesora, los proyectos son interpretables, cualquier opinión respetable. A estas alturas de la historia solo queda esperar, ver y cada cual expresar sus sentimientos e impresiones. Es cierto que necesitaba una actuación, también que se está llevando a cabo bajo la dirección de buenos profesionales. Creemos que cuando se trabaja por ser Patrimonio de la Humanidad no se corren aventuras ni riesgos. Una buena noticia es, por otra parte, el edificio de usos múltiples que dará servicio a más de 5.000 personas de la comarca y otros temas que implican novedad en el día a día seguntino es la nueva exposición Atempora en la catedral, los puntos para recarga de vehículos eléctricos, la limitación de horarios a los contenedores o la regulación del uso de los aparcamientos, proyectos algunos ya iniciados. Sigüenza avanza, lucha contra la despoblación y en todo caso siempre será un referente para el turismo.