Una lectora ucraniana envía a Nueva Alcarria en exclusiva fotos inéditas del drama de Ucrania
Gente hacinada en estaciones repletas de refugiados, personas solas, con frío y rodeadas de destrucción, niños abandonados por las calles, instantáneas de seres humanos en el momento en que abandonan sus viviendas, la situación de los hospitales, despedida en la estación, improvisados refugios en casas y suburbano, madres llorando con sus hijos en brazos, gente pernoctando al raso a temperaturas bajo cero…
Oksana, residente en Azuqueca quiere que el mundo se entere de esta situación, que se plasma en los ojos llorosos de los ciudadanos afectados por la masacre rusa, en el semblante de aquellas personas de su nacionalidad que quieren sobrevivir a toda costa de la agresión y defender su país de una violación a la soberanía de Ucrania.