Pérez Borda señala que “no vamos a dejar caer los edificios que componen el poblado, por ello, lo principal es trabajar en un plan que consolide cubiertas y muros”.
Luchar contra la despoblación implica, también, voluntad. Cobeta ha sido el último ejemplo de cómo el espíritu logra milagros. Sin embargo, no es el único. Hay otros ejemplos, porque en el medio rural son muchos los que están dispuestos a pelear por su pueblo.