"Es el momento en el que más proyectos de regadío hay en toda la historia de la región"
El presidente autonómico acompañó al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en su visita a los regadíos de Illana-Leganiel.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado, este mediodía, que el proyecto inicial de los planes hidrológicos que actualmente se están configurando, contempla “la continuidad del Plan Especial del Alto Guadiana”, lo cual supone “una perspectiva de futuro enorme”, ha subrayado. En este sentido, García-Page ha valorado “la gran batalla que llevamos dando desde hace meses” en este ámbito y ha recalcado que, además del citado plan para el Guadiana, “se están planteando nuevas negociaciones para el resto de las cuencas hidrográficas, también en el Tajo”, ha aseverado.
Así lo ha expresado el jefe del Ejecutivo autonómico antes de visitar, junto al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, las obras de transformación en regadío de las zonas regables de los municipios de Leganiel e Illana, en las provincias de Cuenca y Guadalajara, respectivamente. “No se trata solo de dar de comer o de beber, se trata de generar industria, empleo y transformación”, ha apostillado García-Page.
En relación a la vigencia “garantizada” del Plan Especial del Alto Guadiana mientras no se alcance un buen estado en todas las masas de agua de dicha cuenca, el presidente regional ha destacado que beneficiará “a los agricultores que tienen que reconvertir” sus cultivos y contribuirá a la “sostenibilidad de un área medioambiental verdaderamente importante”, además de facilitar la “subsistencia y el desarrollo de muchos municipios” que no pueden atraer empresas “por no tener agua”, ha proseguido.
En este marco, el presidente castellanomanchego ha reclamado una política hídrica justa y sostenible y ha asegurado que en la Comunidad Autónoma “queremos regar, sabemos regar con una tremenda eficiencia y tenemos que poder regar”, ha rematado. “Como presidente estoy muy cansado de que los que se llevan permanentemente el agua de esta tierra, particularmente del Tajo, que además entiendo que tiene que ser de todos los españoles”, ha continuado García-Page, quien ha remarcado que “el agua no tiene color, pero la gestión del agua sí tiene color; unos lo hacen de una manera, otros lo hacen de otra”.
Durante su intervención en la localidad conquense de Leganiel, el presidente de Castilla-La Mancha se ha referido al conjunto de “la industria” del regadío en la región, “un proyecto global que no está llevando a reconvertir nuestro propio concepto”, ha reflexionado. Al respecto, García-Page ha desvelado que “ahora mismo tenemos proyectos por 184 millones de euros que afectan a 200.000 hectáreas” y que, en conjunto, benefician a 20.000 familias de agricultores.
En este contexto, el presidente autonómico ha remarcado que “es el momento en el que más proyectos de regadío hay en toda la historia de la Comunidad Autónoma”, al tiempo que ha agradecido al ministro Planas el anuncio de seis nuevos proyectos “que están en negociación con las comunidades de regantes” de la región.
En otro orden de asuntos, el presidente García-Page ha avanzado que la región va a acoger, próximamente, “la presentación al más alto nivel del gran proyecto de fondos europeos para el sector agroalimentario”, motivo por el cual ha mostrado su “orgullo”.
En este sentido, el presidente regional ha valorado que “las cosas se están haciendo con mucha cabeza” en el ámbito agroalimentario, un sector “el de la agricultura, la ganadería y su transformación que supone el 18 por ciento de todo el Producto Interior Bruto” de Castilla-La Mancha, ha puesto de relieve.
Durante esta visita, el presidente castellano-manchego ha estado acompañado también por el presidente de las Cortes regionales, Pablo Bellido; el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo; el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca; el delegado de la Junta en Guadalajara, Eusebio Robles; la delegada de la Junta en Cuenca; María Ángeles Martínez; los presidentes de ambas diputaciones provinciales, José Luis Vega y Álvaro Martínez Chana, respectivamente; así como por los alcaldes de ambos municipios y los responsables de la obra, presupuestada en más de 21 millones de euros.