HAY POCO NÍSCALO EN LA SIERRA y encima lo roban

20/11/2023 - 18:45 Paco Campos

La Guardia Civil se ha incautado en una batida policial por el término de Cogolludo de 135 kilos de níscalos en tres intervenciones llevadas a cabo en la zona. En los años pasados rara era la ocasión en que no se cogieran in fraganti a furtivos con más de 400 kilogramos. El motivo: Níscalos y setas son este año un producto escaso, casi de lujo.

“Mala temporada de níscalos”, comenta el alcalde de Cogolludo, Juan Alfonso Fraguas. Los campos están empantanados, lo que los impide proliferar. “La temporada está siendo larga –comenzó en el Puente del Pilar- pero muy poco productiva”, añade. Ese es el motivo por el que este año la Guardia Civil ha detectado una importante bajada de recolectores ilegales en la provincia de Guadalajara.

 

“Para erradicar o minimizar el furtivismo, y junto a la Subdelegación del Gobierno en Guadalajara”, el delegado provincial de la Junta, José Luis Escudero, recuerda que “se ha implementado un sistema de vigilancia que a través del Seprona de la Guardia Civil y del cuerpo de agentes medioambientales del Gobierno regional trata de que no se esquilme el monte durante esta época de recogida y aprovechamiento de setas”. Así, existen patrullas circulando por las posibles zonas de recolección, que también disponen de operativos de control del aprovechamiento, ilustra.

En plena temporada micológica, el Gobierno regional mantiene activado en estas semanas un dispositivo especial de control en la recolección de setas silvestres en el monte para garantizar las buenas prácticas y la conservación del medio natural. Ubicaciones, clasificación de hongos, prohibiciones y otros aspectos están contemplados en Castilla-La Mancha a través de la Orden de 15/11/2016, de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, por la que se regula la recolección de setas silvestres en los montes de la región. Entre otras medidas, prevé una recogida máxima por persona y día de cinco kilos de setas y hongos en los montes de Castilla-La Mancha. En cualquier zona donde no haya un coto regulado, el aprovechamiento en la recogida de setas es libre y episódico y puede hacerlo cualquier persona, aunque siempre con el límite en la cantidad recogida de los cinco kilos por persona y día anteriormente referidos.

Sin embargo, sí hay algunos lugares específicos que presentan una gran abundancia de setas donde hay cotos en los que se paga una cuota simbólica para la recolección, como, por ejemplo, los términos municipales de Cogolludo o Campisábalos, que cuentan con ordenanzas municipales por las que se abona un dinero que permite recolectar cinco kilos al día para autoconsumo.

 

El delegado de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en Guadalajara, José Luis Escudero, señala que en Cogolludo “han ido un paso más allá y se está regulando incluso la comercialización, la compraventa”, algo que puede ser “una buena práctica que nos gustaría que se pudiera instaurar en otros municipios en la medida que evita el furtivismo”.

 

Efectivamente, la localidad serrana es un buen ejemplo de gestión sostenible de la explotación micológica en su término. El regidor deja claro lo que hay que hacer para recoger níscalos y otras setas y hongos de forma legal. “Es muy sencillo”, aclara Juan Alfonso Fraguas. Si se hace de forma recreativa, “tan solo hay que pedir una licencia en el Ayuntamiento o en la Oficina de Turismo, el mismo día de la recogida o con antelación”, ilustra. Para los empadronados es gratuita; para los foráneos tiene un importe de cinco euros al día.

El Consistorio tiene en marcha una iniciativa adicional, según la cual, si la recolección se realiza en grandes cantidades, para ello ha puesto a disposición de los profesionales una licencia para toda la temporada que tiene un importe de 300 euros. “Para ello hay que estar dados de alta como autónomos en la Seguridad Social y poseer el carné de manipulador de alimentos.

 

Fraguas informa de que para ello hay que llevar a cabo la recogida en montes de uso público de titularidad municipal. En lo que va de temporada el Ayuntamiento de Cogolludo ha emitido una veintena de licencias para la explotación micológica profesional de los montes de la localidad y en torno al medio centenar para aquella con fines recreativos.

 

La venta –señala- se debe hacer posteriormente en la explanada que hay adjunta al frontón. “Sólo allí, porque si se hace en algún otro lugar supondría una sanción”.

 

Para el primer edil lo ideal sería la adecuación de una lonja o minilonja de compra-venta, con todas las infraestructuras necesarias para funcionar como mercado, dotado de unos servicios y unas instalaciones en las que se puedan hacer las transacciones de forma profesionalizada, con el objetivo de centralizar la venta de las setas que se recogen en la Sierra. En ello trabaja. “La idea sería tener un sitio donde se pueda garantizar la total seguridad del producto dotando al edificio de vestuarios con oficinas, una báscula, un cuarto de frío, etc.”.

Sin licencia, decomiso y sanción

Si las autoridades competentes detectan una recogida superior a cinco kilos en una persona, proceden al decomiso de la parte excedida y al inicio del correspondiente expediente sancionador, en este caso regulado a través de la Ley de Montes y Gestión Forestal Sostenible de Castilla-La Mancha. Las infracciones tipificadas en esta Ley serán sancionadas con las siguientes multas:

a) Las infracciones leves, con multa de 100 a 1.000 euros.

b) Las infracciones graves, con multa de 1.001 a 100.000 euros.

c) Las infracciones muy graves, con multa de 100.001 a 1.000.000 euros.

 

Buenas prácticas en la recogida de setas

La propia Orden reguladora para la recogida de setas incluye una serie de obligaciones y recomendaciones para esta práctica. Algunas de ellas hacen referencia a la prohibición de recoger ejemplares en formación (es decir, que no han madurado lo suficiente) o que, por el contrario, ya están demasiado maduros para su consumo.

 

La seta se tiene que cortar con navaja o similar en la parte de su base (no arrancar). Posteriormente hay que transportarlas en un recipiente que permita que las esporas se puedan expandir, como una cesta de mimbre o métodos naturales, quedando excluidas y prohibidas las bolsas de plástico.

 

Por otro lado, no se debe ni tocar ni recoger aquellas setas que no se conozcan, por seguridad y por propiciar un uso sostenible de su aprovechamiento. Está prohibido verter cualquier tipo de basura a los montes y hay que respetar el no acceder a las pistas que solamente son para uso del personal autorizado, que cuentan con su correspondiente señalización.

 

El delegado de la Junta hace “un llamamiento para que cuando se salga al bosque, al monte, a recolectar hongos, que se haga siguiendo siempre la guía de setas comestibles y siguiendo las recomendaciones que el cuerpo de agentes medioambientales les ha dado al inicio de la temporada y siempre preservando el propio medio natural”.

 

En el caso de la provincia de Guadalajara, algunas de las especies más abundantes conocidas y deseadas son la seta de cardo, el níscalo, las colmenillas o el boleto. Pero Guadalajara no solo cuenta con muchas especies comestibles, sino también con una gran riqueza biológica en cuando a diversidad de especies.