Los antiguos comercios de la plaza de Santo Domingo

07/09/2025 - 12:55 Eduardo Díaz

Una de las plazas más emblemáticas de Guadalajara es sin lugar a dudas la de Santo Domingo.

En tiempos pretéritos, a esta plaza se la denominó como del Mercado, ya que en dicho lugar se celebraban las Ferias y Mercados, concedidos por el Rey Alfonso X “ el Sabio” en el año 1260. Años más tarde, en esta plaza del Mercado se construyó una puerta principal adosada a la antigua muralla de Guadalajara, la cual daba acceso a la zona principal de la ciudad.

  Antiguamente en la plaza de Santo Domingo existían numerosos comercios, que con el paso del tiempo han desaparecido y han sido sustituidos parcialmente por otros. Una de las edificaciones que presidía la plaza de Santo Domingo era la de la familia de don Álvaro de Figueroa, el cual  poseía el título de Conde de Romanones. A este edificio de viviendas se le conocía cariñosamente en la ciudad como el de las casas de Alvarito. Cuando a principios de la década de los años setenta del siglo XX se derribó el amplio caserón, se construyó un moderno edificio de varias plantas, al cual se le denominó como edificio España. En sus bajos se instaló el primer hipermercado de la historia de Guadalajara con el nombre de Galeprix, siendo inaugurado en septiembre de 1974 y fue el que propició un antes y un después en el comercio  local de la ciudad. Posteriormente este hipermercado, de la cadena de las antiguas Galerías Preciados, fue sustituido por varias marcas comerciales como Hiper Alcarria, Simago y por último la francesa de Champions. En la actualidad únicamente en los bajos existe la oficina inmobiliaria de la empresa constructora Neinor Homes.

Cruzando la plaza por donde circulan los vehículos con dirección a la calle del Carmen, se encontraba un antiguo edificio que acogía en sus bajos la zapatería de la familia Robisco; tras el derribo integral del edificio se construyó uno más moderno y en sus bajos se encuentran las oficinas de la entidad bancaria del Banco de Santander. Adosado a este edificio se unía uno muy emblemático de la ciudad. En la parte inferior se instalaban la tienda de tejidos El Barato y el inolvidable comercio de ultramarinos: “El Buen Gusto”. El propietario de este establecimiento de alimentación era Fermín Sáenz, cuya especialidad eran los tostados diarios que hacía con cacahuetes y que en la ciudad eran conocidos como los cacahuetes del señor Fermín. Una vez demolido el antiguo edificio se construyó uno más moderno y en sus bajos se instaló la oficina de venta de pisos de la empresa Hercesa Inmobiliaria. Al otro lado de la plaza se hallaba el amplio bloque de viviendas de la familia Solano, allí en la planta baja se encontraba la farmacia de Arsenio García Pizarro y la mercería de Elvira, cuya propietaria era Crisanta Fresno. Hace varios años el edificio se derribó y se ha construido otro más moderno respetando el diseño del antiguo edificio, construido por el empresario local Julián Utrilla.

Unos metros más adelante se encontraba el kiosco de golosinas y tebeos del inolvidable José Montes “Pepito”, el cual se ganó la confianza de las gentes de Guadalajara, siendo homenajeado con el premio,” Popular Nueva Alcarria”. Muy cerquita de este inolvidable puesto para la chiquillería, se encuentra un moderno edificio que en su día albergó en sus bajos la Cafetería “Jovi”; este lugar de hostelería acogía en su interior y en su terraza de verano a numerosos clientes de la ciudad; en la actualidad se encuentra la cadena nacional de hostelería “ 90 Coffee”. A pocos metros de la cafetería, antiguamente existía una Expendeduría de Tabacos que en la actualidad ha sido sustituida por una clínica del pie, denominada Podoactiva. Finalmente en el edificio de la plaza de Santo Domingo, con la esquina a la Carrera, existía la empresa inmobiliaria de Jesús Villaverde Bermejo, estando en la actualidad la cadena de restauración Popeyes.

En el año 1949, el ayuntamiento de Guadalajara decidía instalar en la plaza de Santo Domingo el grupo escultórico del Conde de Romanones, que anteriormente había estado frente al palacio del Infantado.